Cuándo contratar un detective privado

¿Cuándo debes decidir contratar a un detective privado?, según la experiencia de profesionales expertos en este oficio, se dan tres tipos de situaciones donde tendrás que hacerlo para poder salir librado de ciertos problemas. 

Al igual que en determinado momento necesitas ir al médico para librar una enfermedad o problema de salud que se te pueda presentar, así mismo es el que decidas contratar a un detective privado, ya que este te ayudará a prever, o en el peor de los casos, resolver enigmas que por tu cuenta no serían posibles de dilucidar.

A continuación en este post conocerás los diferentes tipos de situaciones donde tendrás que contratar a un detective privado, y las ventajas que esto representará para que puedas liberarte de preocupaciones y futuros litigios legales, personales o laborales.

Las situaciones que requieren contratar a un detective privado

Las situaciones en las cuales deberás contratar los servicios de un detective privado, fundamentalmente son tres, y estas son: problemas con tu pareja, para buscar personas que se encuentran desaparecidas y cuando se te lleguen a presentar ciertos problemas laborales.

A continuación podrás encontrar un análisis breve de estas situaciones.

Problemas de pareja

Los problemas de pareja en determinadas circunstancias, pueden llegar a convertirse en un problema bastante desagradable, por lo cual se hará necesario que contrates a un detective privado para que te ayude a aclarar la situación.Entre los problemas que comúnmente se llegan a presentar, son los concernientes a separaciones y divorcios. Pero además, se da  hoy en día con frecuencia un problema común en las parejas como lo es, la infidelidad.

Cuando se presentan situaciones problemáticas a nivel de pareja, son muchos los actores que intervienen en la solución de este conflicto, como lo son los psicólogos, abogados, y también dependiendo del caso, intervendrán los detectives privados.

Cuando uno de los miembros de la pareja sospecha que su compañero(a) le está siendo infiel, suelen contratar a detectives privados, para que este profesional de manera discreta y confidencial, pueda aclarar las dudas e inquietudes acerca de una posible infidelidad del otro miembro. Una vez que este confirma sus sospechas, gracias a la ardua labor del detective privado, tendrá suficientes argumentos para tomar las decisiones que mejor le beneficien, mostrándole las pautas necesarias para accionar al respecto.

Personas desaparecidas o perdidas

Otra de las causas porque muchas personas contratan los servicios de un detective privado, se debe a la desaparición de familiares. Básicamente no tiene que tratarse de personas desaparecidas en una zona determinada. El detective en este caso se encargará de buscar a familiares y allegados a la víctima con los cuales tenía muchos años sin contactar, y también visitará los sitios por donde la victima solía estar con más frecuencia, para de esa manera encontrar pistas al respecto.

También se dan casos, donde las personas contratan a un detective privado, está relacionado con personas que han sido dadas en adopción en su infancia, y estas desean encontrar a sus padres biológicos.

Cualquiera que sea el caso donde requieras los servicios de un detective privado, es necesario señalarte, que lo más recomendable es que contrates a un profesional discreto, que maneje toda la información encontrada con la más absoluta confidencialidad, discreción, ética y conciencia ante los impactos psicológicos y emocionales que podrían provocar sus pesquisas y en ti y en las personas encontradas.

Problemas laborales

Con respecto al ámbito laboral, las personas o empresas podrán contratar un detective privado para que se encargue de investigar y recopilar pruebas relacionadas con denuncias e incumplimientos de contrato, despidos injustos, casos referentes a mobbing, fraude, entre otras causas.

En este caso el detective privado se encargará de investigar y recabar las pruebas necesarias, que podrían servir en los juicios laborales que se deban llevar a cabo, para dilucidar un problema a nivel laboral, bien sea por  parte de la empresa en cuestión, o por parte del trabajador afectado.