¿Cuándo una empresa está obligada a realizar una auditoría contable?

Si tienes una sociedad u organización, es posible que hayas oído hablar de las auditorías. Pero, ¿en qué consisten? Estas son muy habituales en el mundo empresarial, pero no siempre se conoce qué son ni qué tipos existen o cuándo se llevan a cabo. 

De forma resumida, una auditoría es un proceso de evaluación de una empresa u organización, para conocer sus características, fortalezas y debilidades. Más adelante, veremos qué tipos de auditorías hay y cuáles son las características generales de todas ellas. Además, en este artículo ponemos el foco en la siguiente pregunta, que surge habitualmente en la mente de los empresarios: ¿cuándo debe someterse una empresa a una auditoría contable?

Si quieres descubrirlo, ¡sigue leyendo para no perdértelo! A continuación, te lo contamos. 

¿Qué es una auditoría?

La Real Academia Española entiende por auditoría la inspección o verificación de la contabilidad de una empresa o una entidad, realizada por un auditor con el fin de comprobar si sus cuentas reflejan el patrimonio, la situación financiera y los resultados obtenidos por dicha empresa o entidad en un determinado ejercicio. 

Y es que los trabajos de auditoría buscan indagar en la rentabilidad y/o eficiencia de las empresas, en todos sus departamentos corporativos. Pero esto no es exclusivo de las empresas, puesto que también se lleva a cabo en las ONG, instituciones y administraciones públicas. 

Gracias a las auditorías, las empresas y organizaciones evitan cometer irregularidades fiscales o legales, entre otros. Así que llevar a cabo estas prácticas de forma periódica favorece los trabajos del día a día, puesto que los puntos débiles se mejoran, y las fortalezas se potencian. 

Las funciones de un auditor

Pero, ¿qué hace exactamente un auditor en las auditorías? Para inspeccionar minuciosamente la sociedad u organización, hace lo siguiente:

• Establece unas pautas y criterios para seguir un proceso establecido previamente. 
• Observa y mide los procesos de las organizaciones. 
• Tiene en cuenta todos y cada uno de los recursos que forman parte de la actividad económica de la empresa, ya sean recursos materiales o inmateriales. Además, presta atención a la aplicación productiva de esos recursos, y cuál es su importancia en la organización. 
• Lleva a cabo un análisis adecuado y llega a unas conclusiones, que se recogerán en un informe de auditoría.
• Aporta ideas y estrategias personalizadas en función de la naturaleza de la empresa u organización.

Los tipos de auditoría 

Ya hemos adelantado que la auditoría sirve para verificar si los procesos internos de una empresa se están haciendo correctamente. Pero las empresas y organizaciones son muy amplias, con procedimientos de todos los tipos y naturalezas. Es por ello que tiene que haber diferentes auditorías, como son:

• Contable
• Operacional
• De sistemas
• De calidad
• Ambiental

En este artículo, nos centramos en la auditoría contable y en cuándo hay que someterse a ella. ¡Te lo contamos!

La auditoría contable

Como bien indica su nombre, una auditoría contable es aquella en la que se revisa la contabilidad de una empresa. De esta manera, se comprueba que las cuentas anuales son un reflejo de la sociedad y que la empresa no está cometiendo errores. 

Los auditores buscan asegurar la calidad de la información contable, impidiendo que haya errores o problemas con la Agencia Tributaria. 

Hay auditorías contables obligatorias y otras que no lo son. En el caso de las que son obligatorias, se emite un informe de auditoría que garantiza que las cuentas anuales son una representación de la situación real de la sociedad. 

Pero, ¿cuándo una empresa está obligada a hacer una auditoría contable? Por lo general, si cumple dos de los siguientes requisitos, durante dos ejercicios consecutivos:

• Tiene una media de más de 50 trabajadores durante el ejercicio
• Factura más de 5,7 millones de euros
• Tiene un total de activos de más de 2,8 millones de euros