En búsqueda de la almohada ideal para el descanso perfecto

¿Cuándo fue la última vez que pensaste en las almohadas de tu cama? Posiblemente hace mucho tiempo o nunca, pero es completamente normal. Y es que hay muchas personas que, cuando piensan en el “material” para dormir, se enfocan principalmente en el colchón. 

Los colchones reciben mucha atención por una buena razón. Un colchón, al fin y al cabo, es la inversión más grande e importante que harás por tu descanso. Pero cuando se trata de la calidad del sueño, las almohadas son casi tan importantes como el colchón.

Si estás durmiendo sobre una almohada desgastada, estrujándola y doblándola todas las noches para sentirte cómodo, es una señal de alerta de que es hora de renovarla. Incluso si tu almohada no es vieja ni está desinflada, es posible que no sea la mejor opción para tu descanso y comodidad.

Pero, ¿cómo elegir la almohada ideal para el descanso perfecto? A día de hoy, entre tantas opciones disponibles en el mercado, escoger la mejor se convierte en una tarea de lo más compleja. Es por eso que, en este artículo, te contamos qué debes saber. Si quieres descubrirlo, ¡sigue leyendo para no perdértelo!

¿Por qué importa encontrar la almohada ideal?

Una buena postura para dormir es clave para dormir profundamente, noche tras noche, y para despertar sin dolor ni rigidez corporal. La almohada ayuda a mantener una postura de sueño saludable. 

¿Cómo es esa postura? Un cuerpo alineado, desde las rodillas a las caderas, pasando por la columna hasta el pecho y los hombros, la cabeza y el cuello.

Si el cuello y los hombros no reciben suficiente soporte, o están apoyados en un ángulo que causa torsión o rigidez, la columna y el cuerpo dejarán de estar alineados, provocando tensión e incomodidad en el cuello, los hombros y la espalda. También puede tener otras consecuencias, como el insomnio.

Al igual que con tu colchón, la comodidad y el apoyo son importantes para seleccionar la almohada ideal. La mejor almohada para ti es aquella en la que te sientes cómodo para descansar la cabeza, la que brinda soporte para la cabeza, el cuello y los hombros, a la par que encaja con el colchón.

¿Cuándo es el momento de cambiar la almohada?

Si estás en busca de tu almohada ideal, debes saber cuándo es el momento de ir a por ella. Como regla general, las almohadas de cama deben reemplazarse después de 18 meses. 

Las almohadas de espuma viscoelástica suelen durar más, hasta tres años. Y las almohadas naturales suelen durar más que las sintéticas. Como es lógico, las de mayor calidad durarán más que las baratas. 

Si estás usando una almohada que tiene cinco o seis años, no estás recibiendo el apoyo que necesitan tu cabeza y hombros, y no estás durmiendo tan cómodamente como podrías hacerlo.

Puede parecer una vida corta, pero piénsalo: la almohada se usa entre 7 y 8 horas por cada noche, ¡y eso es más de 2500 horas al año! Al igual que tu colchón, la almohada es una inversión en un descanso de alta calidad que muestra resultados en el día a día, incluso cuando estamos despiertos.

Si no estás seguro de si tu almohada tiene vida por delante o no, puedes hacer algunas pruebas simples, como las siguientes:

• Primero, quita la funda de la almohada y examínala. ¿Tiene manchas de sudor? ¿Está rota? ¿Huele? Todos estos son signos de una almohada que necesita ser reemplazada. Las almohadas acumulan células muertas de la piel, hongos y ácaros del polvo. Con el tiempo, hasta la mitad del peso de una almohada se puede atribuir a estos organismos no deseados, que pueden desencadenar en alergias, interferir con la respiración durante el sueño y emitir olores que dificultan dormir bien.

Si su almohada pasa la prueba de la vista y el olfato, es hora de hacer la prueba del pliegue:

• Dobla tu almohada por la mitad. Si simplemente se queda allí doblada, en lugar de volver a su forma original, es una almohada “muerta”. 

La guía para elegir la almohada ideal

Elegir una almohada es un proceso muy personal. Cuando se trata de elegir la almohada adecuada, realmente no hay un tamaño, forma o material de almohada que se ajuste a todos. 

La mejor manera de encontrar la almohada adecuada para ti es determinar tu criterio individual, utilizando tu instinto y estos factores que van a determinar las características de una almohada:

• Relleno o fibra
• Peso
• Calidad del relleno
• Tamaño
• Tela
• Si los materiales son naturales o no