Guía para la compra de una cocina de calidad: las 6 claves

Si estás pensando en reformar tu cocina, ¡estás de suerte! En este artículo, te mostramos la guía para comprar una cocina de calidad. Tendrás que cuidar los detalles, tener en cuenta tus necesidades y la realidad del espacio útil, organizar el interior de los cajones, iluminar correctamente el ambiente…

Otros puntos a favor es escoger un producto ético, es decir, con bajo impacto ambiental. Y, además, elegir las mejores opciones para que la limpieza sea fácil. ¿Quieres descubrir cómo escoger la cocina de tus sueños, una cocina de calidad? ¡Sigue leyendo para no perdértelo! A continuación, te lo contamos. 

El cuidado de los detalles

En la decoración de interiores, así como en las reformas, lo mejor que puedes hacer es cuidar los detalles. Tenemos que cuidarlos desde el primer momento, es decir, desde la planificación y distribución del espacio. 

De esta manera, nos aseguramos de que el resultado va a ser óptimo. Los detalles, al fin y al cabo, marcan la diferencia. No es lo mismo una cocina pensada con delicadeza que una pensada sobre la marcha. 

Además, las obras no son sencillas. Llevan tiempo, dinero y muchos quebraderos de cabeza, por lo que lo mejor es hacerlo perfecto a la primera. Cuidando los detalles desde el primer momento nos aseguramos que optimizamos el espacio a la vez que la decoración tiene coherencia. 

Ergonomía: la cocina como un “traje a medida”

Como quizás sepas, la ergonomía es el estudio de las condiciones de adaptación de un espacio, que puede ser un lugar de trabajo, un vehículo, etc. Se adapta a las características de los usuarios, tanto las psicológicas como las físicas. 

La ergonomía también se puede aplicar en las cocinas, donde el espacio y su optimización es fundamental. Y es que es en la cocina, sobre todo, donde más notamos si los muebles están bien distribuidos o no. 

Siguiendo las bases de la ergonomía, nos aseguramos que el resultado será una cocina que encaja tan bien como un traje a medida. La ergonomía tiene su base en lo siguiente:

• Una distribución adecuada del espacio
• Permitir posturas correctas
• Elegir muebles y electrodomésticos que se centran en las necesidades y costumbres de cada usuario
• Disponer los elementos teniendo en cuenta su óptima visibilidad, accesibilidad e iluminación

Pero, ¿cómo aplicamos estas bases a nuestra cocina? Muy sencillo:

• Distribuye el espacio en triángulos de trabajo, para que cocinar sea más cómodo
• Personaliza la altura de las encimeras 
• Adapta el mobiliario, que es prácticamente lo primero que se tiene que medir
• Instala los electrodomésticos pensando en las posturas que tendrás al utilizarlos, asegurándote de que son posturas viables y cómodas
• Incluye accesorios que favorezcan la seguridad y la comodidad, como columnas de almacenaje de extracción frontal, cubos con pedal…

Accesorios de organización en el interior de los cajones

Es importante que los interiores de los cajones de las cocinas estén colocados. De lo contrario, no encontraremos las cosas o se dañarán algunos utensilios. Hay numerosas soluciones: cajas, cestas, separadores… En definitiva, numerosos accesorios con los que podrás distribuir el espacio en función de lo que vayas a guardar en su interior. 

Por ejemplo, encontramos cuberteros, donde podrás colocar los cubiertos de la forma más segura posible. Los filos de los cuchillos ya no serán un peligro. También hay portaplatos, accesorios que van a hacer que tu vajilla tenga una vida útil más larga. 

Lo ideal es que coloques los cajones con platos abajo del todo. Además, estos accesorios evitan que se derrumben y rompan los platos. Otros elementos que puedes incluir en tu cocina, que te harán el día a día más fácil, son los organizadores de especias, los cajones para los pequeños elementos, etc. 

El proyecto del alumbrado. Ilumina bien la zona 

La iluminación es imprescindible en las cocinas. No solo a nivel estético, sino también por su funcionalidad. Una buena iluminación hará que cocinar sea más sencillo y que la suciedad no se nos escape. Pero, ¿en qué podemos fijarnos cuando iluminamos una cocina?

• Hay que definir los usos de cada área de la cocina, ya que no será igual la iluminación elegida para comer que para cocinar
• Iluminación general, que será uniforme y constante
• Iluminación puntual, por ejemplo situar luces bajo los módulos altos o focos orientables en la pared
• Iluminación ambiental, más estética que otra cosa, en la que podemos utilizar leds en la parte inferior de los armarios 
• Iluminación sobre la mesa de la cocina, como lámparas de techo, con luz suave para no deslumbrar a los comensales

La compra de un producto ético

Estés reformando la cocina, el baño o el salón, lo ideal es que elijas elementos ecológicos, con un bajo impacto ambiental. Cada vez es más frecuente encontrar productos ecológicos en el mercado, por lo que no tendrás ningún problema en adquirirlos para tu cocina. 

Por ejemplo, puedes tener sartenes de hierro mineral o con recubrimiento cerámico, botellas sin tóxicos, cepillos de madera natural, porta alimentos o vajillas, bandejas de bambú… No solo son productos que cuidan el planeta sino que, además, van a hacer tu cocina más agradable.

Mejores opciones para una fácil limpieza

No todas las cocinas se limpian igual. Algunas son más fáciles y otras son más difíciles de limpiar. Esto depende de materiales, superficies, juntas… Por eso, aprovecha a elegir lo que menos te va a costar limpiar. 

• Las superficies lisas son más fáciles de limpiar, por ejemplo, el vidrio. 
• Los azulejos, por sus juntas, son muy difíciles de limpiar, y suelen albergar bacterias y suciedad imposibles de quitar. 
• Los muebles y electrodomésticos, para que sean más fáciles de limpiar, tienen que ser grandes y tener un fácil acceso. Además, cuanto más sencilla sea la apertura, mejor se limpiará.