Contacta con
Legesthorse
Buscar
Si estás pensando en comprar un caballo, ¡estás de suerte! En este artículo, resolveremos algunas dudas muy comunes al dar el paso. Por ejemplo, ¿qué ocurre si has comprado un caballo que no cumple tus expectativas? O, ¿qué pasa si el animal tiene defectos ocultos? Si quieres descubrirlo, ¡sigue leyendo para no perdértelo! A continuación, te lo contamos.
Las razones por las que comprar un caballo son muy variadas: puedes competir con ellos, tenerlos de mascota, utilizarlos en terapias para tratar diferentes dolencias… Y es que, cabe destacar que tener un caballo es muy beneficioso para todos por sus especiales características.
Esto se debe a que, en primer lugar, es un ser vivo, lo que te da la posibilidad de crear un vínculo que no se puede imitar. Además, lo verás crecer, algo muy gratificante. También es una forma de cuidar el medio ambiente, ya que no daña la naturaleza, sino todo lo contrario. ¿Qué hay más eco friendly que un caballo?
Eso sí, debes asegurarte de que vas a proporcionarle unos mínimos al animal, como espacio, tiempo, cuidados, compañía, alimento y las intervenciones médicas que necesite.
Comprar un caballo puede ser algo complicado, ya que no lo hacemos todos los días. Es por ello que hay que tener en cuenta una serie de errores que no podemos cometer al hacer la compra. ¿Cuáles son? ¡Te los contamos!
Hemos hablado de los errores a evitar cuando compramos un caballo pero, ¿qué recomendaciones seguir? Comprar un caballo no es igual que comprar una prenda de ropa, hay que seguir un proceso más exhaustivo:
Es cierto que uno de los consejos es pagar el caballo tras comprobar que el animal cumple con las expectativas. Para ello, lo habitual es dar una parte del dinero pactado, dejando el resto para un tiempo después, una vez podamos garantizar que el caballo es realmente como buscamos.
Pero esto no siempre se cumple. Bien sea porque estamos muy seguros de nuestra elección, porque es un chollo, porque nos lo han vendido estupendamente… Puede suceder que el caballo no cumpla con nuestras expectativas, pero también puede ocurrir que el animal tenga vicios ocultos.
Aunque, ¿qué son vicios ocultos? Los vicios ocultos, también conocidos como defectos ocultos o vicios redhibitorios son los defectos que puede tener una cosa (en este caso, un animal), que es objeto de compraventa, y que no son reconocibles cuando se entrega (en la compraventa del caballo).
Cuando el animal presenta un defecto oculto o no cumple con nuestras expectativas, tendremos que acreditar la existencia del vicio y probar que este tuvo su origen antes de la fecha de venta. Si esto se consigue, se pone en marcha la resolución de contrato, es decir, el contrato dejará de tener efecto.
Los vicios ocultos están recogidos en el Código Civil, y hay que añadir a la definición dada previamente, que si el comprador supiera de esos vicios redhibitorios, no hubiera comprado el animal o, en todo caso, hubiera pagado un menor precio. En otras palabras, el contrato de compraventa no se hubiera llevado a cabo si estos defectos fueran conocidos al principio.
Hemos dicho que es el comprador quien tiene que demostrar que el defecto del caballo existía con anterioridad a la venta, por ejemplo, una enfermedad. Pero hay una excepción, que se da cuando el caballo muere en los tres días posteriores a la compra. En este caso, se presupone la existencia de vicios ocultos, sin necesidad de ser probados por el comprador.
Otro aspecto relevante a tener en cuenta son los plazos para la presentación de la demanda por defectos ocultos, que es de 40 días naturales que comienzan a contar desde que se entrega el caballo, a no ser que exista un contrato que establezca cuál va a ser el uso del animal y regule estas situaciones.
Por eso, tu firma es extremadamente necesaria y recomendable, especialmente desde que, en España, los animales vivos han salido de la legislación de protección a los consumidores.
Contacta con
Legesthorse
Contacta con Legesthorse, indicándole tu motivo de tu contacto.
En la máxima brevedad te contactará a través de tu dirección de email o tu teléfono.
Contacta con
Legesthorse
Para una atención cómoda y personalizada, hazle saber a Legesthorse que le contactas a través de Clic&Post.
Contacta con
Legesthorse
Para una atención cómoda y personalizada, hazle saber a Legesthorse que le contactas a través de Clic&Post.