El aislamiento acústico en las ventanas, ¿cómo funciona?

Si estás pensando en instalar ventanas nuevas, es normal que tengas duda de cuál elegir. Al fin y al cabo, hay infinidad de ellas en el mercado, ¡y cada vez más!

Para empezar, deberás elegir el tipo de perfil que mejor se adapte a lo que buscas, si PVC, aluminio o madera; el acristalamiento; el tipo de apertura, en función del uso que le vayas a dar; la forma de las ventanas; su grado de eficiencia energética; su estética…

Y, por supuesto, tienes que fijarte en el aislamiento acústico que te van a aportar las ventanas que finalmente elijas. Parece algo poco importante pero lo cierto es que instalar una ventana de calidad que aporta aislamiento acústico va a mejorar sustancialmente tu vida. 

Pero, ¿cómo funciona el aislamiento acústico en las ventanas? Si quieres descubrirlo, ¡sigue leyendo para no perdértelo! A continuación, te contamos los factores que influyen para conseguir un buen aislamiento, así como los beneficios que aporta el aislamiento acústico en tu día a día. 

¿Cuáles son los beneficios del aislamiento acústico en las ventanas?

Hay algunos factores que cobran relevancia en la elección de las ventanas, como la eficiencia energética y el aislamiento térmico. Pero otros pasan desapercibidos siendo igual o más importantes, como el aislamiento acústico. 

Es por eso que, en este apartado, te contamos por qué es tan importante esta cualidad en tus ventanas. Independientemente del lugar donde vivamos, aunque con alguna excepción, estamos expuestos a la polución acústica, algo que no beneficia en absoluto nuestra salud, física o mental. 

Hay personas que se alteran mucho con los ruidos pero, aunque ese no sea tu caso, la contaminación acústica termina irritando a las personas.

Al fin y al cabo, si estamos en casa queremos estar tranquilos, y no escuchar las obras, las terrazas desbordadas de gente, los coches…

Si buscas que tu casa se convierta en un espacio tranquilo y confortable, lo mejor que puedes elegir es que te aporten aislamiento acústico. Además, descansarás mejor y reducirás el estrés. 

Es posible que, de tanta contaminación acústica, empecemos a ignorar el ruido. Pero que lo ignoremos no quiere decir que no existe y que no nos afecte. El ruido constante, el bullicio interminable, la falta de descanso y tranquilidad…, incrementa el estrés y la ansiedad, no solo en momentos puntuales, sino de forma continuada, y afecta a nuestro sistema auditivo. 

Por último, pero no por ello menos importante, el estrés, la ansiedad, el ruido, etc., pueden llevar a una tensión arterial elevada y problemas del corazón.

En definitiva, invertir en unas ventanas que ofrecen un buen aislamiento acústico se traduce en invertir en nosotros mismos, en nuestra salud, tanto física como mental.

La forma de apertura

Las mejores ventanas para evitar problemas de ruido son las ventanas practicables, con sistema abatible y oscilobatiente. Es decir, las tradicionales, con sistemas de corredera, no son las más aislantes acústicamente. Las practicables tienen un cierre de doble junta, por las que no se filtran las ondas sonoras. 

La elección del perfil

Una ventana con un aislamiento acústico de calidad es impermeable al aire, porque las ondas sonoras se transmiten por el aire. Y, ¿de qué depende la permeabilidad del aire de una ventana? Sobre todo, de la calidad del sistema de perfiles. 

Si quieres ver si una ventana es de baja calidad, te puedes fijar en las esquinas. Si el aire se filtra por ahí, es de mala calidad. Acompañado del aire, el ruido se filtrará en la vivienda. 

Los materiales

Así como hay que fijarse en la forma de apertura y la elección del perfil, también hay que prestar atención a los materiales para garantizar una buena calidad de aislamiento acústico. Y es que, no todos los materiales reaccionan igual ante las ondas sonoras. 

Por ejemplo, el PVC es un amortiguador natural de las ondas sonoras, así que es perfecto para atenuar el ruido en una vivienda. 

El vidrio adecuado

También tenemos que fijarnos en el vidrio, concretamente en su espesor. El aislamiento acústico dependerá, en gran medida, de ello.

Hay que diferenciar entre los vidrios que ofrecen aislamiento acústico y térmico ya que, por ejemplo, los vidrios con cámara son un buen aislante térmico, pero no acústico. 

Para conseguir un aislamiento acústico de calidad, uno de los vidrios deberá tener un mínimo de 6 mm. Si buscas un alto aislamiento acústico, se recomiendan los vidrios laminados.

Las persianas

Las persianas, aunque no lo parezca, son un elemento imprescindible en el aislamiento acústico de una vivienda. Los cajones de persianas de mala calidad o instaladas malamente, dejan pasar el ruido sin ningún problema, ya que se cuela el aire y, como vimos, con el aire se filtran las ondas sonoras.