Amianto: dónde encontrar este material y sus usos más frecuentes

El amianto es un material con unas características muy útiles, pero que resulta problemático. En esta entrada se habla de algunos usos de este material.

El amianto es un material muy utilizado en el sector de la construcción. Sus cualidades mecánicas lo hacen muy atractivo, ya que es resistente, flexible y aísla de los cambios de temperatura. Sin embargo, es también conocido por los problemas de salud que acarrea en personas que inhalan sus fibras.

Los diferentes usos de la uralita o amianto.

Las aplicaciones en la construcción son las más comunes. De entre todas, la fabricación de tejados es muy representativa, ya que se utilizó de forma extensiva para este fin durante décadas. El material en este caso suele denominarse como uralita y, además de las ventajas ya mencionadas, resulta un material muy barato con el que construir una techumbre para cualquier edificio.

Además, el fibrocemento, otro de los nombres que recibe dicho material, se utiliza para la fabricación de bajantes, canalones y tuberias. Su flexibilidad y resistencia son cruciales para estos usos. El agua no le va a afectar, aunque, en caso de rotura del material, sus fibras acabarían en el líquido y podrían llegar a causar daños en la población. 

Asimismo, este material también se utiliza en las cubiertas del propio tejado, como en depósitos de agua, tuberías o incluso en la construcción de paredes como elemento aislante. Así, el amianto podría estar presente en numerosas partes de un edificio, algunas de ellas muy sensibles; como son las canalizaciones del agua.

Amianto en el sector industrial

Sin embargo, sus usos no terminan aquí, ya que otros sectores han llegado a utilizarlo con diferentes propósitos. Este es el caso del sector industrial. Es un material de fricción que se usa en diferentes tipos de maquinaria industrial, y también se emplea en ascensores, fieltros, cordones especiales, ropa de protección térmica e ignífuga, recubrimientos de pinzas o plásticos y cauchos reforzados. 

En el sector transporte

En el mundo del transporte también se le han encontrado diferentes usos. Por ejemplo, en los barcos forma parte del aislante de las bodegas, de la sala de máquinas, de compartimentos y de los conductos del agua caliente. Por otro lado, en los ferrocarriles también aparece como aislante en los vagones o en el sistema eléctrico; y en los transportes terrestres es un material de fricción para los frenos y empleado en los discos para los embragues.

Además, se ha llegado a utilizar en la confección de elementos decorativos y conductos de aire acondicionado. Por regla general, al ser un buen aislante, es muy sencillo darle un uso en todos los casos mencionados, ya que es una de las características más destacadas que posee.

Su comercialización

Su bajo precio lo hace competitivo, por lo que  muchas empresas que antaño buscaban ahorrar en materiales de construcción recurrieron al uso de la uralita. No obstante, en la actualidad algunas versiones están prohibidas y no se pueden comercializar, ya que resultan demasiado peligrosas para la salud de la población.

En definitiva, al amianto se le han dado diferentes usos, tanto en la construcción como en otros sectores. Sus características y bajo precio lo hacen muy competitivo, pero los problemas que puede crear en la salud de la población y los trabajadores no compensan la inversión realizada en su uso.