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Dentro de las tarjetas, existen numerosos tipos con diferentes funcionalidades y denominaciones comerciales. En primer lugar, hay tarjetas bancarias, no bancarias y de fidelización, que se distinguen por quién las emita:
Aunque en nuestro día a día podemos encontrarnos con las tres tarjetas mencionadas, lo cierto es que la más común es la primera: la tarjeta bancaria. Y, dentro de ella, hay varios tipos, los cuales debes conocer si quieres tomar una decisión y tener una (o varias).
Es por ello que, a continuación, te contamos los tipos de tarjetas bancarias de los que puedes disfrutar. ¡Sigue leyendo para no perdértelo!
Como hemos comentado, una tarjeta bancaria es aquella que es emitida por un banco. Se trata de un medio de pago que pone en circulación dicha entidad financiera a favor de un consumidor. Este medio de pago, además, se asocia a una cuenta y se acepta en numerosos comercios y establecimientos.
Las tarjetas bancarias tienen como objetivo extraer dinero en cajeros automáticos, así como comprar bienes y/o servicios. Estas acciones pueden ser llevadas a cabo tanto de forma física como online.
Dentro de las tarjetas bancarias, existen diferentes clases, según sus funciones y características.
Por medio de esta tarjeta, se pueden utilizar los fondos depositados en la cuenta a la que se asocia. Se pueden usar para hacer pagos en comercios, sacar dinero en cajeros automáticos o en oficinas bancarias, para consultar el saldo y los movimientos de la cuenta…
La principal diferencia que existe entre la tarjeta de débito y de crédito, de la que hablaremos más adelante, es que las operaciones llevadas a cabo por la tarjeta de débito se registran de forma instantánea en la cuenta.
También es importante que este método de pago, por seguridad, tiene un límite diario, sobre todo a la hora de extraer dinero en cajeros.
Se suelen confundir las tarjetas de crédito con las de débito, pero hay que conocer sus diferencias. La tarjeta de crédito permite hacer pagos y obtener fondos a crédito (con un límite).
Pero, ¿qué significa esto exactamente? Quiere decir que no tienes que desembolsar toda la cantidad al momento, pero tendrás que devolver el dinero prestado en los plazos previstos, quizás con intereses.
Las tarjetas revolving, también llamadas revolventes o de pago aplazado, son un tipo de tarjeta de crédito que han generado mucha controversia.
Si bien es cierto que resulta muy cómodo, por permitir devolver el dinero de forma aplazada, en realidad pueden resultar abusivas por el interés tan elevado que suelen pedir.
Estas tarjetas bancarias dan la posibilidad de hacer pagos de pequeño importe, así como de obtener dinero de cajeros automáticos hasta un límite. Una vez agotado el importe cargado, se puede recargar.
Las tarjetas de débito y crédito pueden ser contactless o sin contacto. Es una tecnología por la que no hay que introducir, al pagar o extraer dinero, la tarjeta en el datáfono o cajero. Tan solo hay que acercar la tarjeta y, en caso de ser una operación con un importe superior a 20€, introducir el pin.
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