Descubre la figura del guardián ad litem y para qué sirve

Un guardián ad litem (GAL) es una persona que el Tribunal nombra para investigar qué soluciones serían en el mejor interés de un niño. Aquí, estamos hablando de un GAL en un caso de divorcio o derechos y responsabilidades de los padres. 

El GAL investigará la situación familiar y asesorará sobre cosas como:

• Dónde los niños deben vivir la mayor parte del tiempo
• Si el niño está siendo dañado por el abuso de sustancias de uno de los padres
• Qué contacto debe tener el niño con un padre

¿Qué hace un GAL?

Eso depende de la orden del Tribunal. Se le puede pedir al guardián ad litem que analice la situación general del niño y haga recomendaciones generales sobre cosas como los derechos de los padres. 

Pero por lo general, el Tribunal emitirá un “nombramiento de propósito limitado”. Esto significa que le piden al GAL que analice solo uno o dos problemas, como el historial de abuso de sustancias de un padre o la capacidad actual de un progenitor para tomar decisiones racionales sobre el cuidado de un niño, según la información actual de un psicólogo que ponga el foco en su salud mental.

Lee la orden del Tribunal de su caso para entender qué asuntos le está pidiendo que examine el guardián ad litem. También nombrará a las personas con las que el GAL necesita hablar.

El Tribunal puede ordenar al GAL que presente un informe oral o escrito. Tiene derecho a saber qué hay en el informe.

¿Quién puede ser guardián ad litem?

Por lo general, los GAL pueden ser abogados o algunos tipos de profesionales de la salud mental que hayan recibido capacitación especial.

¿Qué significa “el interés superior del niño”?

Este es el estándar que el guardián ad litem y el Tribunal tienen que usar cuando toman decisiones sobre los niños. La ley define que el estándar de “mejor interés del niño” incluye muchos elementos diferentes. 

Por ejemplo, al hacer una recomendación sobre dónde debe vivir un niño, el guardián ad litem debe considerar la edad del niño. Un niño de cinco años puede tener necesidades diferentes a las de un niño de 15 años.

Otros factores incluyen:

• La relación actual del niño con los padres
• La estabilidad de la situación de vida de cada padre
• La capacidad de los padres para cooperar o aprender a cooperar en el cuidado del niño

En general, el guardián ad litem debe considerar todos los diferentes factores que podrían afectar la relación padre-hijo. Luego hacen una recomendación. La recomendación del GAL debe proteger el derecho del niño a tener una relación sólida y significativa con sus padres, de una manera que tenga sentido y sea en el “mejor interés” del niño.

¿Qué puedo hacer si tengo un problema con el guardián ad litem?

Si te preocupa que el GAL no esté velando por el mejor interés de tu hijo, siempre puedes hablar con ellos. Si no te sientes cómodo hablando con el guardián ad litem, puedes decírselo al Tribunal por escrito o de forma oral en la próxima reunión en el Tribunal. 

¿Qué más necesito saber?

Estos son los puntos principales:

• Si el GAL está recomendando algo que no es lo que el niño quiere, el guardián ad litem debe informar al Tribunal de los deseos del niño.
• El Tribunal “sella” los informes del GAL para que sean privados, para las partes y para el Tribunal. Nadie más puede verlos. Esto significa que no tiene permitido mostrar el informe a otras personas, a menos que obtenga el permiso del Tribunal.
• La ley requiere que los padres cooperen con el GAL. Siempre que el guardián ad litem haga lo que ordenó el Tribunal, debe seguir todas sus solicitudes razonables.
• No puedes ejercer una influencia indebida sobre tu hijo. Esto significa no entrenarlo sobre qué decir al GAL o al Tribunal, y no “orquestar” el comportamiento de tu hijo para obtener una ventaja. Si el GAL o el Tribunal piensan que estás tratando de manipular el proceso de esta manera, probablemente funcionará en tu contra.