Cómo conseguir la nacionalidad española si eres extranjero: lo que necesitas saber

Si llevas años viviendo en España y ya sientes que este país es tu casa, puede que te estés planteando solicitar la nacionalidad española. No es solo un trámite, es un paso que te abre muchas puertas: puedes votar, moverte con más libertad por Europa, y te olvidas de renovar papeles cada poco tiempo.

Eso sí, no es algo automático. Para obtenerla, hay que cumplir ciertos requisitos y preparar bien la solicitud. Aquí te lo contamos todo, explicado de forma sencilla.

¿Qué significa obtener la nacionalidad por residencia?

La vía más común para que una persona extranjera se convierta en ciudadano español es a través de la residencia. Básicamente, se trata de demostrar que llevas un tiempo viviendo legalmente en España y que estás bien integrado en la sociedad.

No es algo que te den por el simple hecho de estar aquí: tienes que solicitarlo y esperar a que te lo aprueben. Y, como en todo trámite administrativo, hay papeles que presentar y condiciones que cumplir.

¿Cuánto tiempo tengo que haber vivido en España?

En general, se piden 10 años de residencia legal, continuada e inmediatamente anterior a la solicitud. Pero hay bastantes excepciones:

• Si eres de un país de América Latina, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial o Portugal, o tienes origen sefardí, solo necesitas 2 años.
• Y en otros casos, basta con 1 año. Por ejemplo, si:
  • Estás casado/a con una persona española.
  • Has nacido en España.
  • Eres hijo o nieto de español de origen.
  • Has estado acogido o tutelado por un ciudadano español.

Otros requisitos que debes tener en cuenta

No vale con solo haber vivido aquí. Además:

• No debes tener antecedentes penales (ni en España ni en tu país).
• Tienes que demostrar que estás integrado. Esto se suele valorar con un par de exámenes.
• Esos exámenes son:
  • CCSE: una prueba sobre la Constitución y cultura general de España.
  • DELE A2: para demostrar tu nivel de español, aunque si vienes de un país hispanohablante, estás exento.

Hay algunas personas que pueden librarse de hacer los exámenes (como menores o personas con discapacidad), pero en la mayoría de los casos, sí son necesarios.

Los papeles que vas a necesitar

Cuando llega el momento de presentar la solicitud, tienes que reunir varios documentos. Entre ellos:

• Tu tarjeta de residencia.
• Tu pasaporte (completo).
• Certificados de antecedentes penales (de España y tu país).
• Empadronamiento actual.
• Los justificantes de haber aprobado los exámenes (CCSE y DELE si corresponde).
• Y un comprobante de haber pagado la tasa correspondiente (que ronda los 103 €).

Dependiendo de tu situación personal, puede que te pidan algo más. Por ejemplo, si estás casado con un/a español/a, necesitarás el certificado de matrimonio.

¿Dónde y cómo se presenta la solicitud?

Hoy en día, se puede presentar por internet a través de la sede electrónica del Ministerio de Justicia. Es más rápido que hacerlo de forma presencial y puedes seguir el estado del expediente online.

Una vez entregado todo, empieza la espera. En teoría, el Ministerio tiene un año para darte una respuesta, aunque puede tardar algo más. Si te lo conceden, el siguiente paso es hacer la jura o promesa en el Registro Civil, y con eso, ya podrás sacar tu DNI y pasaporte español.

¿Qué ventajas tienes al convertirte en ciudadano español?

Una vez que obtienes la nacionalidad, tu situación cambia bastante:

• Dejas de depender de la tarjeta de residencia.
• Puedes viajar y vivir en cualquier país de la Unión Europea sin problema.
• Puedes votar en elecciones generales y locales.
• Tienes acceso a más ayudas y servicios.
• Puedes inscribir a tus hijos como españoles (en ciertos casos).

En resumen, te facilita mucho la vida. Es como dejar de estar “de paso” y pasar a formar parte del país al 100%.

Fallos que deberías evitar

Uno de los errores más comunes es presentar documentación caducada o incompleta. También hay quienes olvidan que deben haber vivido el tiempo exacto que se exige antes de iniciar el trámite.

Y otro clásico: hacer mal el examen CCSE por no prepararlo. No es difícil, pero tampoco conviene confiarse. En la web del Instituto Cervantes hay materiales para practicar.

También ten en cuenta que si tu país no permite la doble nacionalidad con España, al convertirte en español podrías tener que renunciar a tu nacionalidad anterior. Conviene revisar ese punto con calma.

Si tienes dudas, pide ayuda

Aunque puedes hacer todo el trámite por tu cuenta, a veces es buena idea acudir a una gestoría especializada en extranjería o a un abogado de inmigración. Ellos te ayudan a revisar que todo esté correcto y a presentar bien la solicitud desde el principio.

Puede parecer un gasto extra, pero en muchos casos te ahorra tiempo y errores que pueden salir caros.

Un paso que cambia tu vida

Solicitar la nacionalidad española no es solo un trámite legal, es una forma de cerrar un ciclo. Si ya has construido aquí tu vida, es lógico que busques dar ese paso.

Prepara todo con tiempo, asegúrate de cumplir los requisitos y no dudes en pedir apoyo si lo necesitas. Y cuando llegue la resolución positiva, celebra el logro: ya formas parte, oficialmente, de la sociedad española.