Puertas acorazadas, ¿por qué son las más seguras?

Es posible que hayas oído hablar de las puertas acorazadas por todas las ventajas que aportan. Estas son puertas blindadas y, a diferencia de una puerta normal, tienen el centro de acero. 

Así que, de forma resumida, no solo dan seguridad, sino que también ofrecen aislamiento térmico y acústico. 

Pero tienen muchos más beneficios. Si no te los quieres perder, ¡sigue leyendo!

Seguridad 

La principal ventaja de las puertas acorazadas, y la razón habitual por la que se eligen, es por la alta seguridad que ofrecen. Sobre todo si se combina la puerta blindada con una cerradura de calidad. 

Sea cual sea la puerta tradicional con mayor protección, este tipo de puertas dan más seguridad. Y es que están más reforzadas que las demás, así que son menos vulnerables ante posibles robos. 

No solo esto, sino que sus cerraduras suelen ser anti-taladro, anti-extracción, anti-palanca, anti-ganzúa y antibumping. Aunque estas tienen nombres muy intuitivos, la última no tanto. 

Una cerradura antibumping hace frente a la técnica “bumping”, que es aquella en la que se utiliza una llave maestra. Esta se introduce en la cerradura y, con unos golpes, se pueden mover los muelles internos. El resultado es abrir la puerta sin forzarla y sin hacer ruido. Es decir, se trata de una técnica que casi no tiene fallos. 

Instalación fácil y versátil

Las puertas acorazadas pueden instalarse en todo tipo de vivienda, y su instalación es más o menos sencilla. 

Eso sí, hay que tener en cuenta que ha de colocarse correctamente. De lo contrario, puede ser un acceso viable para los ladrones o extraños que quieran acceder a tu hogar. 

Estética

Visualmente, pueden simular las puertas tradicionales de madera, con lo que no se puede saber que se trata de una puerta acorazada. 

Además, como el diseño exterior se puede modificar de forma sencilla, vemos que la seguridad no está reñida con la estética. ¿A quién no le gusta que su puerta sea bonita, aísle y aporte una mayor seguridad?

Pero no solo esto, sino que también puedes cambiar el aspecto de tu puerta acorazada siempre que quieras. Al fin y al cabo, la puerta de nuestro hogar es algo que vemos a diario y varias veces, así que su diseño nos puede terminar aburriendo, cansando, incluso disgustando. 

Aislamiento

Por si fueran pocas las ventajas mencionadas acerca de las puertas acorazadas, hay que añadirle su capacidad de aislamiento. Es una manera de mantener la temperatura de tu hogar, lo que conlleva menos gastos en las facturas, además de una mejora para el medio ambiente. 

Está demostrado por diversas compañías energéticas que, aquellas viviendas que tienen una puerta acorazada, reducen su gasto en un 40%. 

Pero no solo guardan la temperatura, sino que también impiden que entre el ruido exterior como lo haría si tu puerta es una tradicional. Esto es gracias a su grosor y materiales por los que está formado. 

Tanto el aislamiento térmico como el acústico, se traducen en bienestar. Una inversión a cambio de una mejora en nuestra salud.