¿Cómo hacer una mudanza fácil y eficaz?

La mudanza es el proceso por el cual hay una reubicación de la vivienda. Se trata de un servicio multivariable en el que se incluyen el transporte, la protección de los muebles transportados, y la carga y descarga de los mismos. 

Aunque en ocasiones también se incluyen otras prestaciones adicionales como son el embalaje de cajas, o el montaje y desmontaje de muebles. 

Cuando vamos a llevar a cabo una mudanza, queremos que esta sea fácil y efectiva. Y es que bastantes quebraderos de cabeza nos da solo el hecho de que haya cambios en nuestra vida: los espacios, la rutina, el ambiente… incluso la disposición de los muebles. 

Es por eso que, a continuación, te contamos paso por paso cómo hacer una mudanza para que salgas airoso y satisfecho de la situación. 

Haz un inventario de tus pertenencias

Es importante que revises todo aquello que posees. Ya no solo para que no te olvides de nada, sino también para aprovechar y deshacerse de alguna que otra cosa. Es el momento de donar, vender o regalar, aquello que ya no quieres, que ya no utilizas o que nunca has llegado a usar. 

Es en este momento de hacer limpieza que tienes que seleccionar qué te llevas. Un consejo es comenzar por los libros, ya que ocupan mucho espacio pero no requieren casi nada de tiempo. 

Puedes empezar por aquellos que tienes pensado leer próximamente, dividirlos por colores, por temáticas o autores… Hay un sinfín de posibilidades, así que puedes hacerlo a tu gusto.  

Haz una lista de tareas

Es importante que lleves una lista de tareas allá donde vayas mientras estés en un proceso de mudanza. De esta manera, si te acuerdas de algo mientras estás por la calle o haciendo la compra, podrás anotarlo y así no se te olvidará llevarlo a cabo. 

Algunas de estas tareas pueden ser empaquetar las cosas, dar de baja los suministros del hogar, encontrar una furgoneta de mudanzas, comprar materiales, establecer días…

Haz cajas

Es en este momento en que la mudanza se hará real, quizás por primera vez. Este paso solo lo puedes hacer una vez hayas comprobado tus pertenencias y decidido total o parcialmente qué hacer con ellas. De lo contrario, puede ser un completo caos. 

Un consejo referente a las cajas es empezar a empaquetar aquello de lo que podemos prescindir. Pero lo básico, como puede ser la ropa, el cepillo de dientes o el jabón, déjalo para el último día. 

Además, es el momento de embalar adecuadamente los objetos, sobre todo los que son frágiles. Puedes utilizar papel de burbuja y los llamados gusanitos de relleno, dentro de las cajas. Aun así, siempre hay alternativas, como el papel de periódico. 

También hay que tener en cuenta que no debes cerrar las cajas hasta que estas estén completas, sobre todo cuando vamos sección por sección. Es decir, si estás empaquetando los objetos del salón, hasta que no termines con esa habitación, no cierres las cajas, porque siempre puede quedar algún mando de la televisión olvidado. 

Haz el cambio de domicilio

Aunque esta tarea resulta algo tediosa y se suele posponer para más tarde, lo mejor es que te lo quites de encima cuanto antes. Y es que es algo que vas a tener que hacer sí o sí, así que informa enseguida del cambio de dirección en aquellos lugares en los que sea necesario. 

No solo esto, sino que también tendrás que domiciliar tus recibos al nuevo hogar. Lo que va muy de la mano con dar de baja los suministros, así que podrías aprovechar para matar dos pájaros de un tiro. 

Haz la maleta

Cuando quede más o menos una semana para la mudanza, puedes ir haciendo una maleta con todo lo que vayas a necesitar a mano. Si decimos una semana es para que tengas tiempo de sobra y no se te escape nada. En esta maleta puedes recoger ropa, crema, documentación, maquillaje… Lo que utilices en tu día a día. 

Ultima los detalles 

Este es el momento de comprobar que todo está empaquetado y etiquetado, sobre todo las pertenencias más frágiles, y asegura que está todo lo que se incluye en el inventario que hiciste inicialmente.