Tengo un caballo nervioso, ¿cómo puedo ayudarle?

Al igual que nosotros, los caballos pueden estresarse y ponerse nerviosos cuando viajan, compiten o aprenden cosas nuevas. 

Pueden desarrollar nervios y ansiedad de diferentes maneras, desde masticar o rechinar los dientes en exceso, pérdida de peso, hasta asustarse con facilidad, caminar de un lado a otro, sudar e incluso sufrir problemas de salud.

Ayudar a tu caballo nervioso: 5 consejos

Una de las opciones para aliviar gran parte del estrés, es proporcionarle a tu caballo un horario constante, es decir, tener un tiempo de salida frecuente, horas de comida y agua. Además, es recomendable tener a otros caballos para que le hagan compañía. 

Los síntomas y comportamientos de un caballo nervioso pueden ser frustrantes y dificultar que el caballo y el jinete se conecten y logren objetivos importantes juntos.

Entonces, ¿qué puedes hacer para ayudar a tu caballo a sentirse más relajado y seguro? Sigue leyendo para conocer cómo ayudarles a sentirse más tranquilos, relajados y concentrados.

Revisión veterinaria

Los caballos son propensos a preocuparse, lo cual puede llegar a causar problemas de salud como úlceras gástricas, lo que aumenta más ansiedad.

Por ello, si su caballo muestra signos de ansiedad, lo primero que debes hacer es que un veterinario lo examine para asegurarse de que su comportamiento no se deba a una condición física no diagnosticada.

Asimismo, el dolor puede manifestarse como ansiedad, especialmente si ese malestar está relacionado con estar ensillado o montado.

Una vez que su caballo tenga un certificado de buena salud, es hora de comenzar a ayudarlo a sentirse más confiado y seguro. Por ejemplo, si compró recientemente a su caballo, es posible que debas pasar más tiempo en el establo para conocerlo y que se familiarice contigo.

También, es recomendable cepillar a tu caballo, pasearle y conocerlo en situaciones alejadas de los factores externos que le causan ansiedad.

Vuelve a lo básico

Nuestro objetivo como jinetes es que nuestros caballos se sientan seguros y entiendan bien su trabajo. Pues, cuando no lo hacen, les causa confusión.

Cuando un caballo está confundido acerca de lo que le estamos pidiendo que haga, se estresa y reacciona de forma nerviosa.

Muchos problemas de los caballos que se comportan mal o muestran ansiedad tienen origen en el entrenamiento de un caballo antes de que esté bien domado. Esto se debe a que se han saltado pasos durante el entrenamiento, lo cual, se manifestará como confundido y nervioso.

En este sentido, es fundamental corregir cualquier paso que se haya omitido en el proceso de entrenamiento y así, ayudar a que su caballo esté más tranquilo y tenga más confianza en su trabajo y en sí mismo.

Mantén la calma

Muchos jinetes experimentan nerviosismo antes de subirse a un caballo. Lo cierto es que si te sientes incómodo en la silla de montar, es probable que generes nervios en tu caballo.

Esto se debe a que los caballos notan hasta la más mínima diferencia en el comportamiento de su jinete.

Cuando un jinete está nervioso, por lo general se tensa, sujetando las riendas con más fuerza, tensando la espalda y las piernas. Tu trabajo es asegurarle a tu caballo que no hay nada de qué preocuparse.

Por ello, lo mejor es mantener la calma y relajarte.

Mantenga su caballo en movimiento

Para las personas es difícil quedarnos quietos cuando estamos nerviosos. Lo mismo ocurre en los caballos. Así pues, deja que tu caballo se mueva para ayudarlo a liberar sus nervios.

Mantener a tu caballo en movimiento caminando en círculos o en forma de ocho es una excelente manera de mantenerlos concentrados y tranquilos.

Si caminar no es una opción, también lo puedes ayudar practicando un pequeño movimiento como la flexión lateral.

Flexionar a un caballo lateralmente mientras está parado puede ayudar a su caballo a mantenerse tranquilo y suave en la brida al mantener su atención en el jinete en lugar de en un entorno nuevo o estresante.

Lleva las comodidades cuando viajes

Los caballos experimentan aprehensión cuando salen de casa y los trasladan a nuevos lugares.

Para aliviar el estrés y ayudar a su caballo a sentirse seguro en el trayecto puedes hacer lo siguiente:

• Tome descansos cada dos o tres horas cuando lo traslade.
• Lleva a un compañero de viaje para su caballo.
• Lleve cosas que le resulten familiares, como la cuerda favorita de su caballo.
• Habla con tu caballo y tranquilízalo proporcionándole atención adicional.

En definitiva, aliviar los nervios y ansiedad en los caballos es posible. Con el trabajo en equipo entre su entrenador y el veterinario, paciencia y un entrenamiento suave, puede ayudar a su caballo a sentirse seguro y cómodo en muchas situaciones. 

Lo mejor es ir progresivamente y tener en cuenta los intereses y las necesidades de tu caballo para ayudarle a gestionar los nervios.