Impresión 3D de futuras ciudades con hormigón de vidrio reciclado

La pandemia de COVID-19 nos ha obligado a encontrar formas más seguras e inteligentes de construir viviendas y oficinas. La construcción prefabricada con tecnología digital puede ayudarnos a crear viviendas sostenibles y de alta calidad de manera segura y rápida.

Además, el uso de big data e inteligencia artificial en todo el proceso de diseño y construcción puede transformar el sector de la construcción y ayudarnos a proporcionar viviendas sostenibles y asequibles para todos.

A medida que se va retomando la construcción, cada vez es más claro que la construcción se verá diferente después de COVID-19. La crisis mundial de salud pública ha confirmado la necesidad urgente de una nueva forma de construir viviendas y oficinas, utilizando la construcción inteligente para abordar los problemas de diseño, la ineficiencia, las técnicas obsoletas y los desafíos ambientales.

Al mismo tiempo, la demanda de viviendas de alta calidad sigue aumentando, especialmente en las ciudades. Ofrecer a las poblaciones urbanas un alojamiento mejor y más espacioso es fundamental para reducir el hacinamiento y prevenir futuras oleadas de contagios, ya sea de este virus u otro. 

La pregunta es la siguiente: cómo hacer esto de una manera rápida, sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Una respuesta es la vivienda prefabricada, impulsada por tecnología digital.

A diferencia de las casas construidas tradicionalmente, las casas prefabricadas se ensamblan a partir de componentes que incluyen paredes y techos que se producen en fábricas y se envían al sitio para su ensamblaje. Esto ayuda a que sean más baratos y rápidos de construir. La tecnología digital, incluida la inteligencia artificial, la robótica y el Internet de las cosas, también ha mejorado el proceso de diseño y producción.

Te mostramos cuatro formas en que la construcción inteligente impulsada por la tecnología puede transformar el sector de la construcción, asegurando altos estándares de calidad para viviendas asequibles construidas en fábrica y ofreciendo una solución a nuestros problemas de vivienda más apremiantes.

Planificación y diseño más inteligentes

El sector de la construcción ya utiliza Building Information Modeling (BIM), un primer paso en la transformación digital del sector. Se permitió que los proyectos continuaran en un entorno digital y virtual incluso cuando los participantes no pudieron reunirse en persona. 

Este enfoque colaborativo permite que los datos se compartan entre disciplinas profesionales y empresas, y facilita una construcción más inteligente. En la industria de las casas prefabricadas, los datos se pueden incorporar a los procesos de fabricación de componentes y módulos que luego se ensamblan para formar edificios terminados.

Las tecnologías inteligentes, incluida la inteligencia artificial (IA), pueden mejorar aún más el proceso de diseño. Utilizan big data y algoritmos complejos para crear diseños estandarizados al ritmo. Los diseños resultantes pueden luego probarse en una plataforma virtual en términos de su viabilidad y costo, el entorno local y las ideas y requisitos específicos del desarrollador. Esto significa que se pueden tomar decisiones y compromisos en una etapa temprana, lo que acelera todo el proceso.

Los componentes estandarizados desarrollados de esta manera se pueden producir en fábricas con todas las ventajas de la fabricación en masa, como la reducción de costos y la mejora de la productividad y la eficiencia. Para que esto funcione a escala global, los fabricantes deben colaborar y combinar recursos y procesos.

Construcción más segura

Con el soporte tecnológico adecuado, la construcción prefabricada es más segura, rápida y fiable que la obra convencional.

Las fábricas suelen ofrecer un entorno de trabajo más controlado en comparación con las obras de construcción, con espacios de trabajo estáticos y una supervisión más estructurada. 

Esto facilita la implementación de procesos y procedimientos de seguridad, como el distanciamiento físico. Las actividades basadas en el sitio, por otro lado, comúnmente incluyen mucha interacción entre los trabajadores.

La tecnología puede respaldar estos procesos seguros al analizar las actividades de la fábrica y los movimientos de las personas dentro del entorno de la fábrica. Luego, el proceso de producción se puede ajustar para separar a los individuos o crear pequeños grupos que trabajen juntos.

Líneas de tiempo más rápidas y predecibles

El uso de tecnologías digitales inteligentes y la construcción prefabricada puede reducir a la mitad el tiempo de un proyecto, en comparación con las técnicas de construcción convencionales. Este aumento de la productividad es de vital importancia a la hora de satisfacer la demanda acumulada tras los confinamientos.

La vivienda prefabricada también ofrece mayor certeza. Los proyectos de construcción convencionales suelen ver cómo aumentan los costos y se alargan los cronogramas debido a eventos inesperados, como problemas de suministro o mal tiempo. Los proyectos que usan componentes fabricados en fábrica, por otro lado, tienden a ser muy predecibles y no se ven afectados por el clima.

A medida que la construcción prefabricada cobra impulso, los datos recopilados de la fabricación y la construcción se pueden analizar para comprender, optimizar y estandarizar aún más el proceso.

Mejorar la sostenibilidad

Se estima que la industria de la construcción es responsable del 35% al 45% del CO2 que se libera a la atmósfera, lo que la convierte en uno de los principales contribuyentes al calentamiento global. Dados los compromisos globales para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y luchar contra el cambio climático, la industria necesita adoptar urgentemente métodos más sostenibles. La prefabricación puede ser parte de la solución.

Se ha demostrado que la fabricación de componentes en una fábrica reduce las emisiones hasta en un 60%, en comparación con la construcción convencional. Un factor significativo es la fuerte reducción de los movimientos de tráfico hasta en un 40%. Los sitios de construcción convencionales suelen ver un flujo constante de vehículos que entregan materiales y envían desechos. 

Las fábricas, por otro lado, organizan las entregas para minimizar el tráfico. Usando big data, la programación de las entregas se puede planificar y optimizar para reducir la frecuencia, evitar los tiempos “pico” y reducir la doble manipulación en el sitio, todo lo cual contribuye a mejorar la sostenibilidad.

La investigación sugiere que la construcción prefabricada puede reducir los desechos hasta en un 90% en comparación con la construcción convencional, en parte gracias a la ayuda del análisis de datos y la planificación inteligente.

Los elementos prefabricados modernos están diseñados teniendo en cuenta la sostenibilidad a largo plazo, incluido el uso de análisis de datos para diseñar hogares con un uso y almacenamiento de energía óptimos. Estas casas están fabricadas con materiales que tienen una temperatura agradable, lo que reduce la necesidad de calefacción o refrigeración adicional.

Otras soluciones de energía inteligente incluyen la conexión de hogares a automóviles eléctricos y el uso de la energía almacenada en la batería del automóvil para alimentar el hogar. Esto puede ayudar a aliviar los picos en el consumo de energía causados ​​por una alta demanda repentina en ciertos momentos del día.