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Normalmente, cuando vamos a someternos a operación quirúrgica debido a una lesión muscular, de ligamentos, tendones o huesos etc., pensamos en recibir fisioterapia tras la someternos a la operación.
Pero… ¿sabías que si acudes al fisioterapeuta antes de la cirugía también puede beneficiarte en el postoperatorio?
Esto se conoce como prehabilitación, y cada vez hay más personas que lo tienen en cuenta.
La finalidad de la fisioterapia prequirúrgica es ayudar a que la persona que va a someterse a la cirugía llegue más preparada a quirófano.
En este sentido, se produce una mejora de las posibles condiciones de movilidad, elasticidad, fuerza, coordinación e incluso, flexibilidad.
Asimismo, favorece a fijar en nuestro cerebro las rutinas que posteriormente, tendremos que aplicar para recuperarnos.
Esto se debe a que tras someternos a una cirugía corre el riesgo de cambiar nuestra conciencia corporal, puesto que recuerda el dolor o la limitación en el movimiento.
Por ello, es fundamental aprender los ejercicios antes de la operación quirúrgica, para poder asegurar la conciencia de los movimientos.
Así pues, es útil ejecutar los ejercicios marcados por un fisioterapeuta tanto en problemas crónicos como en cirugías planificadas desde hace un tiempo.
Del mismo modo, nos beneficia incluso si la lesión es reciente y la operación se realice dentro de pocos días o semanas.
Además de los problemas musculoesqueléticos, la fisioterapia antes de una operación quirúrgica también sirve de ayuda en intervenciones más complicadas como una cirugía cardiovascular, un trasplante e incluso, cáncer.
Debemos llegar a quirófano en las mejores condiciones físicas posibles, como, por ejemplo, preparando la musculatura respiratoria, ya que cuando vas a estar un tiempo encamado en el hospital, sufres el riesgo de tener complicaciones respiratorias como una neumonía.
En cuanto al momento ideal para empezar los ejercicios preoperatorios, dependerá de la condición física de cada persona.
Por ejemplo, una persona joven o deportista, tiene suficiente con una o dos semanas previas a la operación.
Mientras que las personas mayores que llevan un estilo de vida más sedentaria y tienen más dolor, deberás empezar cuatro o cinco semanas antes.
La fisioterapia antes de una cirugía incide positivamente en el postoperatorio ya que te ayuda a preparar el cuerpo y tu mente.
Pues, existen operaciones que pueden dejar a una persona emocionalmente y físicamente más débil.
De hecho, algunas personas comienzan a tener un estilo de vida más sedentario, provocando que se atrofien los músculos y la fuerza disminuya.
A continuación, destacamos los siguientes beneficios:
En definitiva, la fisioterapia antes de una operación quirúrgica fortalecerá tu cuerpo, además de servir como preparación mental para saber lo que acontecerá el postoperatorio y dar una mejor respuesta, acelerando y mejorando los resultados de tu recuperación.
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