¿Es bueno hacerse un blanqueamiento dental? 

Cada vez ponemos en práctica más tratamientos para vernos mejor por fuera, lo que se traduce en vernos mejor por dentro. Es por ello que el blanqueamiento dental ha cobrado popularidad en los últimos años.

Pero, ¿es bueno hacerse un blanqueamiento dental? Hay quien cree que es bueno y quien piensa todo lo contrario. Si quieres descubrir la respuesta, ¡sigue leyendo para no perdértelo! A continuación, te lo contamos. 

¿Qué es el blanqueamiento dental?

El blanqueamiento dental es el proceso en el que se aplica un agente blanqueador en los dientes, a base de peróxido de hidrógeno al 35%, el cual se activa con una fuente de luz. Y es que, el paso del tiempo y los malos hábitos hacen que los dientes pierdan su color original, oscureciéndose, perdiendo su brillo y salud, etc. 

Algunos hábitos que favorecen que los dientes se oscurezcan son el tabaco, consumo en exceso de café e infusiones, ingesta de alimentos con mucho colorante, bebidas carbonatadas…

Pero, además, hay otras causas por las que nuestros dientes ya no son lo que eran, como hipoplasias, tetraciclinas, fluorosis o haber utilizado colutorio a modo de antiséptico. 

¿Es bueno?

El blanqueamiento dental no es, en absoluto, malo para los dientes. Si se hace de la mano de un profesional, es un método seguro y efectivo que apenas tiene riesgos. Por lo general, los efectos secundarios llegan cuando el blanqueamiento dental no se hace de forma apropiada o se hace en exceso. 

Posibles efectos secundarios del blanqueamiento dental

El efecto secundario más habitual del blanqueamiento dental es la sensibilidad dental. Si quieres minimizar esta sensación, debes hablarlo con tu dentista para asegurarte de que corres el menor riesgo posible. 

Aun así, encontramos más efectos secundarios a largo plazo, como son:

• Daño en las raíces de los dientes
• Deterioro en el esmalte dental
• Blanqueamiento desigual en los dientes
• Daño en las membranas de las mucosas bucales

Además, estos efectos secundarios pueden verse potenciados si eres una persona que ya tiene sensibilidad dental, que nota cambios intensos en la sensibilidad dental después de las limpiezas bucales o que tiene sensibilidad con el hilo dental, enjuague o cepillado. 

Por último, las encías pueden irritarse, pero esto solo ocurrirá si se ha utilizado en exceso el agente blanqueador, si hay fallos en la capa protectora durante el tratamiento o si se ha utilizado un aplicador defectuoso en el tratamiento.