La enuresis: causas, síntomas y tratamientos

Cuando hablamos de enuresis nos referimos a la dificultad de los niños para poder controlar la orina durante las noches o los días. 

Este problema puede afectar a niños a partir de los cinco años e incluso a adolescentes, pero ¿cuáles son las causas? ¿Y los síntomas? ¿Cómo se puede solucionar? Si quieres saberlo, ¡sigue leyendo para no perdértelo! A continuación, te lo contamos.

Enuresis o incontinencia urinaria, ¿qué es?

La enuresis nocturna, incontinencia urinaria o micción involuntaria nocturna es aquella que se produce por las noches mientras el niño o adolescente está dormido. Este problema también puede afectar por el día y se le denomina enuresis diurna.

¿Qué tipos de enuresis existen?

La enuresis se puede clasificar como nocturna, si solo se presenta por la noche; diurna, si solo se presenta por el día o nocturna y diurna, si se combinan las dos anteriores.

Hay dos tipos de enuresis:

1. La enuresis primaria, es la más frecuente y en este caso, el niño no ha aprendido a controlar la orina desde que era un bebé.
2. La enuresis secundaria, se desarrolla después de que el niño ha aprendido a controlar su vejiga durante un periodo de tiempo de al menos seis meses, pero ha sufrido una recaída y ahora vuelve a tener incontinencia.

¿Cuáles son las causas de la enuresis?

Aunque no existe una única causa absoluta de este problema, los especialistas hablan de diversos factores que ayudan a que este problema se desarrolle:

• Problemas de sueño: es la más común y consiste en que el niño o adescente se encuentra en un estado de sueño tan profundo que le impide despertarse cuando su vejiga está llena.
• Genética: se transmite de generación en generación, por lo que algunos niños que sufren de enuresis tienen algún progenitor que lo sufrió a su misma edad.
• Estrés: también es uno de los motivos más comunes de la incontinencia urinaria, las causas de este estrés pueden ser un divorcio, una mudanza, cambio de colegio… En estos casos la incontinencia suele ceder cuando el estrés lo hace también.
• Problemas de vejiga: en algunos casos la vejiga del niño o adolescente es demasiado pequeña como para retener una gran cantidad de líquidos. En otros casos, la propia vejiga tiene demasiados espasmos musculares que ayudan a la expulsión de líquidos de manera involuntaria.

Existen otras causas como la toma de algunos medicamentos o diferentes afecciones médicas como pueden ser la diabetes, el déficit de atención y la hiperactividad.

En cualquier caso, la enuresis suele afectar más a los niños que a las niñas pero se desconoce el por qué.

¿Cómo se diagnostica la enuresis?

En primer lugar, el médico hará una entrevista tanto al paciente como a sus padres y la intención de esta entrevista no será más que conocer la situación actual del niño y cuáles son sus hábitos durante el día. Por ejemplo, con qué frecuencia va al baño, si toma algún medicamento, si tiene alergias…

Mediante preguntas que hará el doctor, este podrá saber qué tipo de enuresis sufre el niño (diurna, nocturna o ambas) así como alguna de sus causas (estrés, genética, estreñimiento…).

Después de la primera toma de contacto mediante la entrevista, el doctor procederá a realizar un examen físico que incluirá un análisis simple de orina y un cultivo de la misma. Este análisis se realiza para descartar posibles infecciones de orina que impidan al niño controlar sus ganas de orinar. Normalmente, estas pruebas suelen dar un resultado negativo por lo que se descartan los problemas nerviosos y las malformaciones en la vejiga.

¿Cuál es el tratamiento de la enuresis?

En la mayoría de los casos la enuresis suele desaparecer a medida que pasa el tiempo y de forma totalmente espontánea antes de que el niño haya superado los 6 años.

Algunas de las recomendaciones que hacen los médicos para ayudar a superar la enuresis de forma natural es la realización de rutinas tales como:

• Hacer pis antes de acostarse.
• No beber líquidos dos o tres horas antes de irse a dormir.
• No tomar bebidas con cafeína.
• Contar los días en los que se ha mojado o no la cama.

Otros tratamientos:

1. Alarmas enuréticas o de incontinencia urinaria: la principal función de estas alarmas es sonar cuando se detecta que la ropa interior se ha mojado. Con el tiempo, el niño o adolescente asocia la sensación de querer hacer pis con la de despertarse y acudir al lavabo. Si estas alarmas se usan de la manera adecuada, en unas semanas el problema habrá desaparecido y se tendrá el control total de la orina.
2. Medicamentos: hay dos medicamentos principales que se usan para la incontinencia urinaria, la imipramina y la desmopresina. Ambos medicamentos tienen que ser usados bajo la supervisión de un adulto y la prescripción médica.

No se suelen usar normalmente ya que al terminar el tratamiento existen grandes posibilidades de que la incontinencia urinaria regrese de nuevo a la vida del niño o adolescente.

Se suele recurrir a la utilización del tratamiento con alarmas como el de medicamentos cuando la causa principal de la enuresis no es el estrés, en este caso, se deberá proceder al tratamiento de dicho estrés antes que de la propia incontinencia urinaria.

Si consideras que tu hijo ya tiene la edad suficiente como para controlar la orina y no es capaz de hacerlo, no dudes en consultar con su médico para que le pueda ofrecer la ayuda necesaria y hacer más fácil la vida de tu hijo.