Informe de Idoneidad Parental: ¿de qué trata?

Dentro de los procesos judiciales, a veces son imprescindibles los informes psicológicos periciales. Estos son pruebas fundamentales en los procesos mencionados, y es que son una evaluación psicológica de la persona implicada o personas implicadas. 

Es decir, los informes psicológicos periciales son pedidos por jueces y abogados para determinar cuál es la situación mental del acusado. Por ejemplo, encontramos el informe de idoneidad parental. ¿Quieres saber en qué consiste? ¡Sigue leyendo para no perdértelo!

El informe de idoneidad parental

Este informe se hace para evaluar al progenitor o al núcleo familiar, estableciendo cuáles son las mejores condiciones para los menores, en cuanto a custodia y patria potestad se refiere. 

Para ello, se llevan a cabo técnicas, instrumentos y procedimientos de la Psicología. De esta manera, se descubre si hay alguna patología que pudiera afectar negativamente a la capacidad parental del progenitor o progenitores. 

Pero no solo se evalúa la capacidad del padre o de la madre, o de ambos, sino que también hay que comprobar que la persona investigada no engaña al psicólogo forense, que es el encargado de hacer el informe de idoneidad parental. 

Aunque parece que esto último es impensable, lo cierto es que muchos progenitores dan una falsa imagen positiva para recibir un informe favorable, cuando la realidad es todo lo contrario. 

¿Qué se valora en el informe?

Hay numerosos aspectos que se valoran a la hora de hacer un informe de idoneidad parental. Los profesionales tienen que considerar, de forma rigurosa, cómo es la crianza, las habilidades de comunicación, la personalidad…

Además, se utiliza información relevante que hayan podido aportar otros miembros de la familia, además de los conocimientos que tenga el propio psicólogo forense

Las áreas que habitualmente se evalúan en los casos de custodia, son las siguientes:

• La personalidad
• El ajuste psicológico de los progenitores
• El entorno y el contexto socio-ambiental
• Las actitudes parentales
• El estilo educativo
• La historia familiar, así como las dinámicas familiares
• El ajuste general de los hijos
• Las variables interactivas
• La adaptación de los hijos a la familia

Todo lo que resulte de la evaluación previa, se recoge en el informe de idoneidad parental. De esta forma, el juez tendrá un apoyo para tomar las decisiones necesarias. Esta es la figura que decide si el progenitor o progenitores tienen o no la capacidad de hacerse cargo de su hijo menor. 

Las capacidades de los progenitores

Antes hemos comentado las áreas en que se fijan los psicólogos forenses, pero son muy amplias. Es por ello que, a continuación, hablamos de las capacidades que evalúan más concretamente:

• Cómo gestionan los progenitores sus propias emociones, y si han desarrollado habilidades para el autocuidado, como gestión del estrés, del estado de ánimo, autocontrol, control de impulsos…
• Si tienen las habilidades necesarias para dirigir y controlar el aprendizaje de los hijos, estableciendo disciplina, normas y hábitos para que estos se preparen para la vida en sociedad. 
• Si disponen de los conocimientos necesarios para potenciar la capacidad de los hijos en cuanto a alimentación, higiene y seguridad. 
• Que cuiden y protejan a los hijos de diversos riesgos. 
• Que se comuniquen eficazmente y tengan empatía, sentido del humor…