Comportamiento en la adolescencia: 5 problemas habituales

A menudo, los adolescentes esán de mal humor, nos contestann o están rebeldes ya que pasan por una etapa de autoafirmación y de  cambios hormonales que les desestabilizan. Sin embargo, como padres no debemos bajar la guardia ya que una cosa es discutir acaloradamente pero de manera puntual, y la otra es mostrarse irritado y enfadado por largos períodos de tiempo, actitud que puede indicar problemas más serios como: el consumo de substancias psicoactivas, el fracaso escolar, absentismo, bulling, etc… 

Por tanto, es importante detectar los cambios de humor que perduren en el tiempo y que afecten  al comportamiento y rutina diaria de nuestro hijo/a adolescente, con el fin de  prevenir daños mayores y poder encontrar la raíz del problema para ayudarle lo antes posible.

A continuación, mostramos algunos de los problemas más habituales que pueden tener los adolescentes:

1. Consumo de substancias psicoactivas: Alcohol y Drogas.

Los adolescentes se entregan cada vez más al alcohol, las drogas antes de llegar a la edad legal. De hecho, ya no es sorpresa descubrir que tu hijo de 15 o 16 años ha comenzado a beber alcohol, etc. Estos comportamientos crean adicción y pueden provocar en tu hijo consecuencias muy negativas que pondrán en peligro su estabilidad personal, incluso su futuro. Por ejemplo, el consumo de drogas puede provocar daños personales  graves a corto y largo plazo. Habitualmente, estos comportamientos adictivos facilitan las relaciones sexuales abiertas, en muchos casos sin protección, que conllevan  riesgo de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual con las serias consecuencias tanto a nivel personal como social. Es importante prevenir y/o corregir este tipo de comportamiento, orientando y concienciando a tu hijo adolescente acerca de los peligros que estos actos conllevan.  

2. Aumento del uso de dispositivos digitales

Actualmente por todos es sabido que el uso abusivo y excesivo de dispositivos de comunicación, pantallas y redes sociales puede convertirse en una adicción y afectar al estilo de vida y a la actitud de nuestros hijos con graves consecuencias para su desarrollo personal y social. Las redes sociales pueden, además, abrir las puertas a extraños y también permiten acceder a información inadecuada para chicos y chicas vulnerables e influenciables.

3. Alteraciones en el estado de ánimo, compulsividad, ansiedad, insomnio… 

Los cambios en el estado anímico, pueden ser comunes en el comportamiento adolescente, en parte se debe a los cambios que experimenta su cuerpo debido a las hormonas y al crecimiento, a  las incertezas  y  dudas vitales, a la reafirmación de su identidad, a las intensas vivencias sociales que experimentan, etc…. Pueden pasar de estar felices y contentos a sentirse tristes o enfadados e incluso muy irritados en poco tiempo. En época de exámenes, por ejemplo, o bien al finalizar una relación amorosa… es normal que un chico/a adolescente se muestre más estresado e irritado de lo habitual, por la tensión y presión del momento.

Pero si estos cambios de humor se mantienen en el tiempo sin causa aparente, pueden sugerir que algo más sutil está sucediendo…. La ansiedad, el insomnio, la depresión, los comportamientos compulsivos… son indicadores de que “algo” no anda bien, de que existe algún conflicto de base emocional, seguramente relacionado con un sentimiento negativo respecto a su valía personal. 

Ante esta situación, es recomendable sentarse a hablar con nuestro hijo/a para intentar que explique qué le sucede…. Hacer lo posible para escucharle e intentar comprenderle,  sin juzgar ni perder la calma ….es importante mostrarle nuestro apoyo pues le aporta confianza y seguridad. 

4. Mentiras

Puede ser muy desalentador para los padres, descubrir que nuestro hijo nos ha mentido o nos ha revelado toda la verdad. Lo cierto es que su nuevo sentido de independencia hace que les parezca innecesario contar todo. Además, el miedo a ser juzgado y castigado puede obligar a un adolescente a mentir, lo que podría convertirse en un hábito  y generarle problemas personales y sociales…a veces muy graves.

5. Amigos 

Socializar es una parte crucial en el desarrollo personal y social de los adolescentes que están reafirmando su identidad. A medida que los adolescentes cultivan amistades y relaciones románticas, comenzarán a desarrollar las habilidades de comunicación y aprendizaje social, la autoconciencia necesaria y las experiencias que los ayudarán a tener éxito en el mundo personal, social y profesional.

Generalmente, las personas con intereses similares se suelen unir de forma natural. Sin embargo, pueden surgir problemas cuando un adolescente vulnerable, inseguro,  con problemas de autoestima, empieza a salir con la gente equivocada o líderes tóxicos,  grupos con ideales extremistas, etc . 

Estas situaciones pueden evitarse, reforzando la seguridad en si mismo, ayudándoles a conectar con intereses y motivaciones sanas, por ejemplo competir en un equipo deportivo, practicar un deporte, compartir una afición (música, skate, y un largo etcétera…) y mejorar el sentimiento de valía personal.

Como padres, nuestros hijos son nuestra prioridad, sin embargo, aunque lo intentamos de mil y una maneras, solos, no podemos solucionar todos los problemas de nuestros hijos… entonces nos sentimos frustrados, cansados e impotentes!

Existen diferentes metodologías terapéuticas que pueden ayudar a nuestros hijos en su desarrollo madurativo y personal, a encontrar soluciones, a conectar con motivaciones e intereses que les permitan tomar las riendas de su vida y mirar con ilusión hacia el futuro.