Entrevista a María Muñoz López, de Somos tu Fisio: «Mi trabajo es cuidar de las personas, del equipo y de un proyecto que crece»

En el corazón de un barrio que ha visto crecer su proyecto desde cero, Somos tu Fisio celebra ya una década dedicada al cuidado de las personas. Lo que empezó como el sueño de dos socias con una visión clara —ofrecer una fisioterapia honesta, cercana y de calidad— se ha convertido hoy en un espacio multidisciplinar donde el bienestar físico y emocional se cuidan por igual.

Detrás de este recorrido hay pasión, esfuerzo y una forma muy personal de entender la salud: escuchar antes de actuar, acompañar antes que imponer y tratar personas, no solo lesiones. Con más de 16 años de experiencia en el sector, su fundadora ha sabido combinar la ciencia con la vocación, creando una clínica que ha crecido al ritmo de las necesidades de sus pacientes, incorporando especialidades como podología, pilates terapéutico y enfermería dermoestética.

En esta entrevista, nos habla sobre los valores que han guiado su camino, el enfoque integral que diferencia a su clínica y cómo ha logrado que Somos tu Fisio se convierta en un verdadero referente de confianza en el barrio.

¿Cuáles son los valores que promueves con Somos tu Fisio? 

Desde que fundamos Somos tu Fisio hace ya 10 años, junto a mi socia teníamos muy claro que queríamos  crear algo más que una clínica: queríamos crear un espacio de cuidado real. No solo físico, sino también  emocional. Por eso, los valores que promovemos son, ante todo, humanos. 

El primero es la empatía. No tratamos lesiones, tratamos personas. Cada una tiene una historia que influye  en su recuperación, y entenderla es clave para nosotras. 

Otro valor esencial es la honestidad profesional. No prometemos milagros: explicamos con claridad qué  esperar, cuánto durará el proceso y qué parte depende del compromiso del paciente. Esa transparencia  genera confianza. 

Creemos en la formación continua y la innovación. Nos actualizamos constantemente para ofrecer  tratamientos eficaces, sin perder el trato cercano que nos define. 

Y, por supuesto, la igualdad. Somos una empresa creada por mujeres y lideramos con ejemplo, promoviendo  un entorno donde todas las personas puedan crecer y conciliar. 

En definitiva, Somos tu Fisio es un reflejo de cómo entiendo la fisioterapia: como una combinación de ciencia,  vocación y humanidad. Y creo que ese enfoque es lo que nos ha hecho crecer, fidelizar pacientes y, lo más  importante, ayudar a muchas personas a recuperar su calidad de vida. 

¿Cuál es el procedimiento que sigues desde el momento en que os llega un nuevo paciente?

Cuando una persona entra por primera vez en Somos tu Fisio, lo primero que hacemos es algo muy simple,  pero que muchas veces se olvida: escucharla. Para nosotras, el primer contacto es mucho más que una cita  médica. Es una oportunidad para conocer su historia, su ritmo de vida, sus miedos, sus hábitos y, sobre todo,  cómo está afectando el dolor o la lesión a su día a día. 

No nos limitamos a evaluar una rodilla o una espalda, sino que tratamos de entender a la persona en su  conjunto. Esto nos permite hacer una valoración mucho más completa y diseñar un plan de tratamiento  realista, personalizado y coherente con sus objetivos.

Después viene la parte técnica, claro. Realizamos una exploración física detallada, analizamos pruebas  médicas si las hay, y valoramos factores posturales, musculares y emocionales que puedan estar influyendo.  Utilizamos técnicas basadas en la evidencia científica, pero sin perder el contacto humano. Nos gusta explicar  todo al detalle, resolver dudas y que el paciente se sienta parte activa del proceso. 

Una vez diseñado el plan, empezamos el tratamiento con un enfoque muy claro: combinar lo mejor de la  fisioterapia manual, el ejercicio terapéutico y las tecnologías que realmente aportan valor, siempre  adaptadas a cada caso. Y durante todo el proceso, mantenemos una comunicación cercana y continua,  porque creemos que el seguimiento también es una forma de cuidar. 

En resumen, no trabajamos con protocolos cerrados ni con prisa. Nuestro procedimiento está pensado para  que cada persona se sienta escuchada, comprendida y acompañada desde el primer minuto. Porque para  nosotras, ser fisioterapeutas no es solo tratar lesiones: es mejorar la vida de las personas. 

¿Cuántos años de experiencia tienes en el sector? 

Me diplomé en Fisioterapia en 2009, y en cuanto terminé empecé a trabajar, así que llevo ya más de 16 años  en el sector sanitario. Al principio estuve trabajando por cuenta ajena, cogiendo experiencia en distintos  centros, y en 2016 decidí abrir mi propia clínica. Desde entonces, además de seguir tratando a pacientes,  también he aprendido muchísimo sobre gestión, trato con equipos y todo lo que conlleva llevar un proyecto  propio. Ha sido un camino muy intenso, pero también muy gratificante. 

¿Cuál es tu especialidad en Somos tu Fisio? 

Aunque somos especialistas en terapia manual, yo me he especilizado también el el tratamiento del cólico  del lactante y en la fisioterapia estética que son dos areas que me encantan y no tan conocidas. 

En pocas palabras, ¿cómo describirías tu trabajo en la clínica? 

Diría que mi trabajo es una mezcla de ciencia, vocación y gestión. En Somos tu Fisio combino mi papel como  fisioterapeuta con la labor de dirigir un proyecto que nació hace 10 años con mucha ilusión y una visión muy  clara: ofrecer una fisioterapia cercana, honesta y de calidad. 

Como CEO y cofundadora, mi día a día va mucho más allá del tratamiento físico: también acompaño al equipo,  cuido la relación con nuestros pacientes y me aseguro de que cada decisión refleje los valores con los que  nacimos. 

En resumen, mi trabajo es cuidar… de las personas, del equipo y de un proyecto que crece, pero sin perder  nunca su esencia.

Si pudieras elegir tener un superpoder, ¿cuál te gustaría que fuera? 

¡Clarísimo! Querría tener el superpoder de que mis pacientes hicieran los ejercicios en casa sin que se lo  tuviera que recordar 50 veces. Algo así como una mezcla entre telepatía y telequinesis: yo pienso en el  ejercicio… ¡y ellos lo están haciendo sin rechistar, con buena técnica y sin excusas! 

¿Cómo nació la idea de crear una clínica multidisciplinar como Somos tu Fisio y qué motivó a ampliar  servicios con podología y enfermería? 

La idea de Somos tu Fisio nació, en parte, de una necesidad muy personal: la de tener un trabajo que realmente me gustara, que fuera estable y con el que pudiera sentirme realizada cada día. Pero también  nació de una inquietud mucho más profunda: la de emprender, hacer las cosas a mi manera y dejar un sello  propio en la forma de ejercer la fisioterapia. 

Desde el principio, mi socia y yo teníamos claro que queríamos acercar tratamientos de calidad a los vecinos  y vecinas del barrio. No queríamos una clínica más, sino un espacio en el que la gente se sintiera escuchada,  cuidada y bien atendida, sin tener que irse muy lejos de casa para recibir una atención profesional y  actualizada. 

La ampliación de servicios hacia podología y enfermería no fue algo que planificáramos desde el principio,  sino que fue surgiendo de forma muy natural, escuchando a nuestros pacientes. Nos dimos cuenta de que  muchas personas necesitaban un abordaje más completo, y querían poder resolver en un mismo lugar  problemas que muchas veces están interrelacionados. Así que decidimos crecer con sentido, manteniendo  nuestros valores pero ampliando el abanico de cuidados. 

Al final, todo responde a lo mismo: cuidar a las personas como nos gustaría que nos cuidaran a nosotras. Y si  eso implica sumar nuevos profesionales y servicios, lo hacemos encantadas. Porque Somos tu Fisio es un  proyecto vivo, que evoluciona al ritmo de las personas a las que acompaña. 

¿En qué crees que la clínica ha sido pionera dentro del barrio o qué os diferencia de otros centros de  fisioterapia de la zona? 

Siempre tuvimos claro que queríamos aportar algo diferente al barrio, y creo que lo hemos conseguido siendo  pioneras en varios aspectos. Por un lado, somos especialistas en terapia manual, y apostamos por un trato  completamente personalizado, sin tratamientos en serie ni con prisas.

Además, fuimos de las primeras en introducir en la zona servicios como la podología, la fisio estética y la  fisioterapia para embarazadas, acercando especialidades que antes obligaban a desplazarse a otras zonas  de Madrid. Y todo esto lo hemos hecho sin perder nunca la esencia con la que nacimos: honestidad y  empatía. 

Tratamos a cada paciente como nos gustaría que nos trataran a nosotras. Esa combinación entre  profesionalidad y humanidad es, sin duda, lo que más nos diferencia y lo que ha hecho que muchas personas  confíen en nosotras año tras año. 

¿Cómo ha evolucionado la clínica desde sus inicios hasta hoy y qué metas hay para los próximos años?

La clínica ha evolucionado muchísimo desde que abrimos. Empezamos siendo un equipo pequeño, con  mucha ilusión y con ganas de hacer las cosas bien, apostando siempre por un trato cercano y personalizado. 

Poco a poco fuimos ganando la confianza de nuestros pacientes, y eso nos ha permitido crecer, incorporar  nuevas especialidades y rodearnos de un equipo humano que comparte nuestra forma de entender la  fisioterapia. 

Además, en los últimos años hemos apostado fuerte por la tecnología. Hemos incorporado equipos de  radiofrecuencia para tratamientos de fisioterapia y próximamente contaremos también con un ecógrafo, que  nos permitirá mejorar el diagnóstico y la precisión en nuestros tratamientos. Y como parte de esta evolución,  en breve abriremos nuestra nueva unidad de enfermería dermoestética, un proyecto que nos hace mucha  ilusión porque amplía los servicios que ofrecemos, siempre manteniendo nuestra esencia: cuidar a las  personas desde la cercanía, la calidad y la confianza. 

De cara al futuro, la idea es seguir creciendo, formándonos e innovando, pero sin perder lo más importante:  ese trato humano que hace que nuestros pacientes se sientan como en casa. 

La fisioterapia del embarazo, el suelo pélvico y el cólico del lactante son áreas muy específicas. ¿Qué os  llevó a especializaros en estos tratamientos? 

La verdad es que muchas de las especialidades que hoy forman parte de la clínica, surgieron precisamente  de escuchar a nuestros pacientes. Nos dimos cuenta de que muchas mujeres llegaban con molestias durante  el embarazo o después del parto sin saber que la fisioterapia podía ayudarles. Lo mismo nos pasó con los  papás y mamás que venían desesperados por los cólicos de sus bebés y no encontraban soluciones efectivas. A partir de ahí empezamos a formarnos de manera específica para poder dar respuesta a esas necesidades.  Creemos que esa capacidad de adaptarnos, de estar atentas a lo que nuestros pacientes realmente necesitan,  es una de las claves de la evolución de Somos Tu Fisio. 

Además de la fisioterapia tradicional, ofrecéis pilates terapéutico y podología. ¿Cómo se complementan  estos servicios dentro del tratamiento integral al paciente? 

Desde el principio apostamos por un enfoque integral del paciente, en el que diferentes disciplinas se  complementen para conseguir mejores resultados. El pilates terapéutico, por ejemplo, es una herramienta  maravillosa para trabajar la prevención y la recuperación desde el movimiento consciente y controlado.  Muchos de nuestros pacientes, después de pasar por tratamiento, siguen con pilates para mantener lo  conseguido o reforzar zonas más vulnerables. 

En cuanto a la podología, vimos que muchas personas llegaban con problemas recurrentes —dolor de  espalda, de rodillas, de cadera— y al hacer una valoración más global detectábamos que el origen estaba  muchas veces en el pie. Por eso decidimos incorporar también este servicio, para poder tratar desde la base  y no solo desde el síntoma. 

Al final, todo forma parte de una misma visión: mirar al paciente como un todo y trabajar de forma  coordinada para mejorar su salud, su bienestar y su calidad de vida. 

Si pudieras resumir en una frase lo que significa Somos tu Fisio para el barrio, ¿cuál sería?

Somos el espacio de salud del barrio en el que siempre pueden confiar.