¿Cómo maquillarse para ir a una boda de día?

Cuando acudimos a una boda como invitadas, siempre nos preguntamos cómo tendremos que ir. Si un vestido largo o corto, el pelo recogido o suelto, un maquillaje sutil o potente…

Sea cual sea la elección de tu vestido y de tu peinado, el maquillaje te garantiza destacar entre las demás invitadas. Y es que, en ocasiones, se olvida que es parte del look. Lo que recomendamos es resaltar la belleza natural de cada una, buscando un estilo sofisticado y elegante. 

Pero bastantes nervios y prisas hay ese día como para no saber cómo maquillarnos. Así que, para hacerte las decisiones más llevaderas y que disfrutes más del gran evento, te vamos a contar cómo te tienes que maquillar si vas a ir a una boda de día, paso por paso. 

Hidrata y corrige

Los nervios, el calor, la gente… harán que terminemos sudando, con la cara llena de brillos que para nada queremos, ya que empeoran nuestro aspecto. 

Para evitar esto, tendrás que limpiar, hidratar y maquillar la piel de tu rostro. Utiliza productos adecuados, especializados.

Además, siempre puedes aplicar alguna ampolla flash efecto lifting, que hará que tu piel apagada y cansada, reviva. 

Y, en caso de haber manchas rojas, granitos, ojeras… puedes utilizar un corrector. Preferiblemente, un corrector iluminador. 

Aplica la base

Como pasarás todo el día fuera de casa, sudarás, etc., asegúrate de que la base que utilizas es resistente y con alta cobertura. También lo ideal es que tenga un acabado mate o, de lo contrario, el acabado brillo se sumará a tu propio sudor, haciéndote brillar más que una bola de discoteca. 

Además, de esta forma evitarás tener que retocar tu maquillaje cada dos por tres. Mucho mejor si haces uso de alguna base que garantice su duración de 24 horas. Así, solo tendrás que preocuparte por pasártelo bien en el evento. 

Utiliza polvos compactos

Los polvos compactos se utilizan para matizar el maquillaje, la base que hemos aplicado previamente. Estos los tendrás que echar en la zona T, que es aquella formada por tu frente, nariz y barbilla, la más propensa a ser grasa y brillar. 

En caso de tener una piel muy blanca y querer broncearla un poco, siempre puedes utilizar polvos bronceadores. Aunque con cuidado, ya que no queremos hacer cortes extravagantes y para nada estéticos entre un cuello y pecho blancos, y una cara morena. 

Maquilla los ojos

Este es el paso que más te va a hacer destacar. Puedes hacer uso de tu imaginación o basarte en alguna imagen de referencia que encuentres. 

Lo recomendable es utilizar: beige, marrones, rosas… Pero también puedes guiarte por los colores de tu vestido, traje, bolso, etc. 

Además, puedes añadir luminosidad a tu mirada haciendo uso de una sombra más clarita que el resto, también en la zona del lagrimal. 

Delinea los ojos

Esta parte es completamente opcional, ya que hay a quien le resulta muy complicado de hacer o, directamente, a quien no le gusta el resultado. 

Si delineas la parte superior de los ojos con líneas finas, enmarcarás la mirada de una forma natural. 

En caso de querer más luminosidad, tener una mirada más despierta y viva, siempre puedes delinear la línea interna del párpado inferior con un lápiz claro. 

Como paso final en los ojos, aplica una capa de máscara de pestañas en las superiores. Lo óptimo es utilizar dos tipos: una que aporte volumen y otra waterproof, por si el evento se vuelve muy emotivo (que seguro que sí). O, en su defecto, una máscara que aporte esas dos características. 

Pinta los labios

El color del pintalabios dependerá del que hayas elegido para los ojos. Si los ojos son más claros, elige un color de labios más oscuro. Y viceversa. 

Siempre puedes utilizar, además, un gloss transparente. No aportará color, pero hará que tus labios tengan más volumen. 

Aplica color en las mejillas

El rubor es algo natural, y entre las capas de maquillaje es posible que este desaparezca. Así que, sin miedo, ¡aplícalo tú! 

Puedes utilizar un blush, es decir, un colorete, claro: desde el centro de los pómulos hasta la sien. La idea es resaltar los pómulos y acentuarlos, así que guíate por el color natural de tu piel.