¿Qué es la limpieza de fin de obra?

Todos estamos de acuerdo en que hacer obras en nuestra casa es un quebradero de cabeza. No solo lleva tiempo y dinero, sino que encima conlleva mucha paciencia y desgaste emocional. Además, la limpieza brilla por su ausencia, tanto durante como después de la obra. 

Por eso, surge la limpieza de fin de obra, específica para reformas. ¿Quieres descubrir en qué consiste exactamente? ¡Sigue leyendo para no perdértelo! A continuación, te lo contamos. 

La limpieza de fin de obra, ¿qué es?

La suciedad acumulada después de una obra es bastante molesta. Por mucho que intentemos impedir que se manchen las superficies y muebles, es inevitable. Encontraremos polvo, manchas de pintura…, en sitios donde no sabíamos que cabía suciedad. Además, todo esto nos impedirá apreciar la obra recién hecha.

Lo ideal es contratar a un servicio de limpieza que se encargue de la limpieza de fin de obra de la mano de profesionales. De esta manera, te olvidarás de los restos de polvo y suciedad, y recuperarás un espacio limpio e higienizado.  

Hay que tener en cuenta que este servicio se puede poner en práctica tanto durante como después de la obra. Con los productos y equipos especializados, el servicio de limpieza se deshará de las grandes cantidades de suciedad, que son muy difíciles de limpiar de otra manera. 

¿En qué consiste el proceso?

Los profesionales de limpieza pueden acudir a las instalaciones que hay que limpiar antes de que finalice la obra o una vez finalizada. Allí, se evalúan las características del interior, así como de todos los espacios en los que se vaya a trabajar. No solo esto, sino que además se analiza cuáles son los productos más adecuados en función de los materiales y las condiciones. 

Una vez se conocen las características de lo que será el trabajo, se llega a un acuerdo para establecer presupuestos, fechas… 

Los productos

Para limpiar correctamente una casa después de una obra o reforma, no se puede utilizar cualquier producto. Necesitaremos disolvente para eliminar las manchas de pintura. Si se va a limpiar en el interior, el producto tiene que ser más suave. Si, por el contrario, lo que se pinta es el exterior, puede ser más fuerte. 

En el caso de limpiar restos de cemento, habrá que utilizar productos con un pH inferior a 7 para no dañar ninguna superficie. Pero no solo encontraremos pintura o cemento, sino que podemos ver silicona y pegamento alrededor de suelos y ventanas, utilizados sobre todo para las juntas. Lo que utilizaremos, en estos casos, es una espátula y acetona.

Las superficies y estancias

En un servicio de limpieza de fin de obra, es imprescindible desinfectar el cuarto de baño. De esta manera, nos aseguramos de que es un espacio libre de gérmenes, listo para ser utilizado. 

También es muy habitual que, al hacer reforma, se coloquen nuevos cristales en puertas y ventanas. En la limpieza de fin de obra se retiran todas las etiquetas, quitando todas las marcas y manchas. Además, se utilizan bayetas de microfibra, así como productos específicos con propiedades anti huellas.

No solo esto, sino que también se atiende a los espacios comunes que se han visto afectados, como pueden ser el ascensor y las escaleras. Por norma general, los obreros no las limpian, algo que enfada a los vecinos y puede crear conflicto.