Visagismo, la técnica más efectiva para el maquillaje

El visagismo se basa en un estudio minucioso del rostro con el fin de encontrar los puntos fuertes de una persona para resaltarlos con maquillaje.

Esta se trata de una técnica muy aplicada en el sector de belleza, puesto que permite a cada persona lucir la ropa que mejor le sienta, peinarse de acuerdo a la fisonomía de su rostro y maquillarse de forma que realce las facciones más favorecedoras.

El visagismo en el maquilaje

El visagismo está presente para analizar cada una de las partes del rostro y saber cómo maquillarlos para obtener el mejor resultado posible.

Esta técnica fue creada por Claude Juillard, cuya intención es estudiar las formas y proporciones del rostro en su conjunto para hacer un maquillaje personalizado.

El objetivo es resaltar los rasgos y realzar la belleza de cada individuo. Así pues, incluye los ojos, las cejas, las pestañas, la nariz, los pómulos, la boca, el mentón e incluso el cabello y la figura de la persona a maquillar.

No obstante, algunos pueden ver el visagismo como un procedimiento para unificar estilos de rostro y rasgos, y que por ello, se pierde la individualidad y esencia propia. Pero, en realidad, esta técnica lo que busca es un estudio en profundidad del los tipos de rostros para poder ofrecerles el maquillaje que mejor se adapte a él.

Visagismo y tipos de cara

La forma de la cara se puede clasificar en diferentes categorías, teniendo en cuenta sus características. 

Encontramos tres zonas a la hora de dividir el rostro:

• Intelectual: se mide desde el cuero cabelludo hasta las cejas, es decir, la frente.
• Emocional: considera la distancia desde las cejas hasta la base de la nariz.
• Sensible: desde la base de la nariz hasta el mentón.

Cabe mencionar que estamos hablando de forma general y que las clasificaciones pueden variar en mayor o menor medida.

Caras ovaladas

Este tipo de rostro es ideal a la hora de maquillar por las proporciones que tiene. De hecho, la mayoría de maquilladores profesionales tratan de conseguir un resultado que simule este tipo de rostro. 

Además, en las caras ovaladas se puede emplear cualquier tipo de maquillaje.

Caras redondas

Las caras redondeadas se asemejan a la forma de un círculo casi perfecto que transmite ternura y delicadeza. En estos casos, las técnicas aplicadas buscan asemejarse a un rostro ovalado mediante las sombras en las sienes y el mentón.

Además, es recomendable utilizar una base de un tono más oscuro en el contorno de la frente y en el borde exterior de los ojos.

Caras cuadradas

Este rostro tiene las mandíbulas y frente muy definidas. Por tanto, se busca suavizar estos rasgos aplicando sombra en la frente y el mentón.

El aspecto del maquillaje debe ser redondeado y así, aproximarse a una cara ovalada.

Caras alargadas

También denominada cara rectangular, presenta una barbilla cuadrada, sienes y mandíbula bien definidas.

Asimismo, se puede apreciar una distancia considerable entre la frente y la barbilla. Este rostro debe emplear sombras en las sienes y el mentón.

Caras triangulares

El mentón en la cara triangular es visiblemente más ancho que la frente. La sombra se usa en el área central del mentón y en los lados de la frente. 

Además, se busca iluminar los laterales del maxilar, y se añade rubor con movimientos circulares en la parte superior del pómulo.

Caras triangulares invertidas

Aquí la zona de la frente es ancha, mientras que la barbilla es más estrecha. En este caso, se realzan las cejas y se les da forma de arco.

Partes del rostro y visagismo

La cara está formada por diferentes elementos, y cada uno de ellos presenta sus propias características:

La frente

La frente puede ser ancha o estrecha. En cualquier caso, nos ayudamos del cabello para igualar las dimensiones.

Lo cierto es que las frentes más anchas utilizan flequillos que ocupan parte de su superficie para disimularlo. Y en el maquillaje, emplean tonos más oscuros en la zona donde nace el cuero cabelludo proporcionarán una sensación de estrechez.

En cuanto a las frentes más estrechas, debemos agregar iluminación para dar una sensación de amplitud. Los tonos más claros y las cejas finas también son más favorecedoras, ya que no ocupan espacio de más en la frente.

La nariz

En el caso de narices pequeñas, se recomienda aplicar colores claros en el centro. Mientras que en narices anchas desde el final de las cejas hasta la punta. En el caso de las narices aguileñas se sugiere aplicar sombra tanto en el tabique como en la punta.

La barbilla

A veces, el mentón puede tener una hendidura que lo hace ver más expuesto. Por tanto, debemos utilizar un corrector más oscuro.

En cuanto a las caras alargadas con mentón estrecho es mejor un iluminador en los lados para ensancharlo un poco. Por otro lado, el mentón ancho asume mejor los  tonos oscuros, ya que permite igualar las proporciones.