El estudio biomecánico de la marcha: qué es, en qué consiste, por qué se realiza

El estudio biomecánico de la pisada es una de las pruebas que ha adquirido mayor relevancia en los últimos años.

Una prueba clínica orientada no solo a deportistas, sino a todo el mundo, tanto adultos como niños.

Contribuye a diagnosticar, tratar y prevenir posibles alteraciones en el aparato locomotor, además de mejorar nuestra salud.

¿Qué es el estudio biomecánico de la marcha?

Los estudios de la marcha o estudios de dinámica de la marcha incluyen varias estrategias de investigación destinadas a diagnosticar posibles alteraciones en el sistema locomotor.

Los estudios de huella se basan en el análisis del pie en reposo y en movimiento, incluyendo su relación con estructuras como la rodilla, la columna o la cadera.

El hecho de que una parte importante de las lesiones de nuestro cuerpo, tengan su origen en nuestros pies, apunta a la necesidad de entender cómo caminamos. 

Es por esto que este estudio se ofrece como un avanzado método para diagnosticar la salud, no solo del pie, sino de nuestro aparato locomotor.

¿En qué consiste el estudio biomecánico de la marcha?

En primer lugar, el podólogo comprobará el estado de los músculos y articulaciones del paciente y comprobará su estado físico realizando una serie de pruebas

La prueba, que suele durar entre 30 y 45 minutos, básicamente consta de tres fases: 

• Análisis en descarga: se tumba al paciente y el podólogo examina el estado de sus músculos y articulaciones.
• Análisis Dinámico: visualizamos y registramos la alineación de pies, cadencia, rodillas y caderas.
• Análisis de la huella plantar: utilizando una plataforma de presiones, se visualiza la huella plantar (tanto en estática como en dinámica), porcentajes de presión y medidas de estabilidad.

Durante este examen en ningún momento el paciente sentirá ningún tipo de dolor ni sensación desagradable. 

Gracias a esta información, es posible evaluar el estado y los movimientos del paciente al caminar o correr y

Así pues, no hay motivo para esperar a sufrir alguna patología para someternos a este examen. Es recomendable realizarse un estudio de manera preventiva.

Al examinar los pies, se realiza un diagnóstico que indica posibles problemas con nuestros pies. 

Sin embargo, no se requiere ninguna anormalidad para este examen, por lo que se recomienda realizarse un examen de la pisada para prevenir una posible patología del pie y mantener una buena salud del pie.

¿Por qué se realiza el estudio biomecánico de la marcha?

Este estudio se realiza para conocer la posición de las articulaciones y músculos del individuo para evitar una forma incorrecta que pueda causar problemas y/o dolor.

Algunos ejercicios, como correr, pueden ser muy beneficiosos, pero también pueden tener un impacto negativo en las articulaciones, especialmente en los tobillos, las rodillas, las caderas y la columna. 

Un estudio de la marcha ayuda a determinar el origen de un problema o, en el caso de que todavía no se hubiera manifestado, prevenir futuras afecciones. Esto se consigue por medio de tratamiento ortopodológico o plantillas que ayuden a minimizar las lesiones.

Recomendado en el caso de niños

En los niños, este estudio es importante para el diagnóstico precoz de posibles cambios en su estructura ósea, tanto en la columna, a nivel de la pelvis, como en las rodillas o los pies. 

Se recomienda casi siempre si el niño resulta ser mayor de 2 años y aún camina torpemente sin razón aparente. También si se observa que suele hundir los pies, se cae o se queja de dolor al caminar o correr.

A partir de los 3 años, aún sin problema aparente, es aconsejable realizar revisiones periódicas (1 vez / año) de carácter preventivo, hasta finalizar la etapa de desarrollo.

Recomendado en caso de adultos

Este estudio también es importante para los adultos, practiquen o no deporte, pero especialmente si planea incursionar en el mundo del ejercicio, como el running, hacer ejercicio en el gimnasio o participar en actividades físicas.

Significado del resultado del estudio biomecánico de la marcha

• Pisada neutra o fisiológica: correspondiente al 60% de la población.
• Pisada pronadora: esto ocurre en torno al 40% de las personas y consiste en doblar el tobillo hacia dentro más de 5º.
• Pisada en supinación: es demostrativa, afecta a menos del 1% de la población y se asocia a un pie rígido sin mínima pronación, a partir de 0-2°.

Ahora que ya conoces la importancia de realizarse un examen de la pisada no dudes en ponerte en contacto con un profesional y acudir a consulta.