Cómo construir una piscina para niños: 7 consejos

Las piscinas son imanes naturales para los niños, especialmente los más pequeños. Pues, es habitual que se sientan atraídos por ellas, ya que, nada les gusta más que nadar, chapotear y jugar en estas fuentes de agua durante horas.

Por lo tanto, debes tener claro que una vez que tengas una piscina en tu jardín, esta se convertirá en el patio de recreo constante de tus hijos.

No obstante, es importante que al construir una piscina para niños dar prioridad a diferentes aspectos como la seguridad. Además de funcionar como un parque acuático que brinde a los niños horas interminables de diversión, debe proporcionar tranquilidad a los adultos.

A continuación, ponemos a tu disposición algunos consejos e ideas claves para construir una piscina para niños:

Elige un espacio adecuado

Cuando vayas a construir la piscina asegúrate de elegir una zona plana y nivelada. Por tanto, comprueba que no haya árboles cercanos que puedan dejar caer hojas, ramas o frutos en la piscina, lo que puede incrementar el tiempo que inviertas en limpiarla.

Además, es clave optar por un lugar que de acceso a una una manguera y así, poder llenar la piscina.

Tamaño y la forma

Es crucial que decidas la forma y el tamaño de la piscina considerando tus necesidades y el espacio disponible que tienes en tu jardín.

Pues, si dispones de un espacio limitado, es mejor optar por una piscina más pequeña. De hecho, las piscinas para niños suelen ser más pequeñas, pero aún así, deben ser lo suficientemente grandes para que los niños puedan moverse cómodamente en ella.

Mientras que si tienes más espacio para aprovechar, es mejor elegir una piscina más grande y así, resultar más cómoda para los niños.

Asimismo, te recomendamos que valores la forma de la piscina. Pues, las piscinas para niños suelen presentar formas simples, como por ejemplo, rectangulares o circulares. Estas son más fáciles de construir y de mantener.

No obstante, si eliges una forma más compleja, como una piscina que presente curvas o tenga forma de L, será más difícil de construir y además, necesitará que hagas un mayor mantenimiento.

Cabe mencionar que las piscinas para niños suelen contar con una profundidad de entre 0,5 y 1,5 metros.

Cuando la piscina es para niños bastante pequeños, es importante que tenga una profundidad con la que poder mantenerse en pie dentro del agua y que no sea demasiado profunda para ellos.

Elige los materiales correctos

Te aconsejamos que optes por materiales duraderos y resistentes a la corrosión. Prueba en utilizar plástico resistente o vinilo para el revestimiento interior de la piscina y madera tratada para la estructura exterior.

Además, debes asegurarte de que los materiales sean seguros para los niños, es decir, no deben contener bordes afilados ni partes que puedan desprenderse y causarles algún tipo de daño.

Por otro lado, es imprescindible que la piscina disponga de un borde seguro y estable para evitar que los niños se caigan o se golpeen mientras juegan.

Área segura

Coloca un cerco de seguridad, una puerta de seguridad o una cubierta de piscina para evitar que los niños entren sin vigilancia.

También, debes garantizar que no haya objetos peligrosos cerca de la piscina, como herramientas de jardinería, juguetes con piezas pequeñas o productos químicos.

Mantenimiento y limpieza

Cuando hacemos una limpieza y mantenimiento de la piscina, garantizamos la seguridad de nuestros hijos.

El mantenimiento implica tareas como tener un adecuado control del nivel de cloro, ajustar el pH, limpiar el filtro y mantener la piscina libre de hojas y otros desechos.

Asimismo, tienes que asegurarte de que el equipo de la piscina esté en óptimas condiciones de funcionamiento y aplicar las reparaciones necesarias cuando se requiera.

Equipo de seguridad

Proporciona un equipo de seguridad para los niños. Así pues, incluye chalecos salvavidas, flotadores o juguetes inflables que ayuden a los niños a mantenerse a flote.

Esto se debe a que incluso si los niños saben nadar, estos pueden cansarse y necesitar ayuda en el agua.

Reglas en la piscina

Por último, cuando tengas la piscina construida asegúrate de que los niños conozcan sus reglas de uso.

Esto consiste en enseñarles normas como no correr cerca de la piscina, no empujar a otros niños en la piscina, no bucear en áreas poco profundas y siempre nadar con un adulto supervisando.